domingo, 5 de septiembre de 2010

De la novela se pasó al ensayo como género divulgador de ideas por excelencia. La literatura neoclásica realizó una crítica de las costumbres, incidiendo en la importancia de la educación, el papel de la mujer y los placeres de la vida.5 Destacaron en España el fraile benedictino Benito Jerónimo Feijoo, Gaspar Melchor de Jovellanos y José Cadalso.
Cobró importancia la fábula, relatos o poesías normalmente ejemplificadas con animales, donde se exponen enseñanzas morales. La fábula se caracterizaba por ser una composición de carácter didáctico, por la crítica de vicios y costumbres personales o de la sociedad, y por la recurrencia a la prosopopeya o personificación. Es el subgénero que más se adaptó a las preceptivas neoclásicas: una composición sencilla en la que la naturaleza interviene, y que enseña divirtiendo. Destacaron los fabulistas Félix María de Samaniego y Tomás de Iriarte en España, y el francés Jean de la Fontaine

neoclasicismo

La Ilustración fue un movimiento intelectual que provocó que el siglo XVIII fuera conocido como el «Siglo de las Luces». El culto a la razón promovido por los filósofos ilustrados conllevó un rechazo del dogma religioso, que fue considerado origen de la intolerancia, y una concepción de Dios que pasaba de regir el mundo mediante las leyes naturales a desaparecer en concepciones ateas del universo. Los ilustrados promovieron la investigación de la naturaleza, el desarrollo científico-técnico, la educación y la difusión general de todo tipo de conocimientos; fueron los tiempos de L'Encyclopédie. El arte se hizo así más accesible y con menos pretensiones, y la literatura se dirigió a un público más amplio, planteándose como un instrumento social. El aumento del número de lectores, especialmente entre la burguesía, plantea la figura del escritor como un profesional, y la escritura como su fuente principal o secundaria de sustento.
Francia fue la primera en reaccionar contra las formas barrocas, y los tres grandes ilustrados, Voltaire, Montesquieu y Rousseau se cuentan entre sus principales exponentes. También destacaron Pierre Bayle, Denis Diderot, George Louis Lecler y Chamblain de Marivaux. En Inglaterra tuvo una gran cantidad de adeptos la novela de aventuras, destacando Daniel Defoe, Jonathan Swift, Samuel Richardson y Henry Fielding, junto a los poetas John Dryden y Alexander Pope.

El Neoclasicismo

El Realismo

neoclasicismo♥





Contexto histórico- social del s. XIX

El siglo XIX es una época en la que se realizan notables transformaciones en todos los aspectos.

Durante este siglo se dio la Revolución Francesa, que con sus ideas reformistas provocó una profunda crisis en la sociedad y la política, que producirá el final del Antiguo Régimen y del sistema monárquico absolutista.

En el s. XIX va a dominar un sistema liberal que defiende la soberanía popular: el poder reside en el pueblo, el cual está representado por personajes elegidos por sufragio universal. También son defendidas las libertades de pensamiento y expresión.

Después de la caída de Napoleón se sucederán una serie de enfrentamientos entre absolutistas y liberales, pero sin consecuencias importantes. Además del liberalismo se desarrollará el socialismo utópico, defendido por Saint-Simon, que condena los abusos del capitalismo y propone un tipo de sociedad igualitaria. Con la publicación del Manifiesto Comunista de Marx y Engels en 1848 se dará paso al socialismo científico, que produce una revolución en la sociedad y la economía.

Al mismo tiempo se desarrollan los grupos nacionalistas que produjeron independencias en algunos países europeos como Grecia o Bélgica. Más tarde, aparecerán gobiernos más autoritarios que serán apoyados por la burguesía que había optado por una posición más conservadora para defender sus privilegios, como hizo Napoleón III (Francia) o la reina Victoria (Inglaterra).

Por lo que podemos decir de la sociedad, la tradicional sociedad estamental deja paso a una sociedad de clases. La burguesía toma parte en el poder y sigue ligada con el desarrollo industrial. Esta es la llamada “Era del maquinismo”, donde se desarrolla mucho el ferrocarril, hay grandes avances técnicos y sanitarios (la vacuna por Pasteur) y se inicia el capitalismo.

La expansión demográfica es también uno de los graves problemas durante este siglo. Las grandes concentraciones que se producen en las ciudades más industrializadas provocarán enfrentamientos entre burgueses y proletarios; la clase obrera actuará por medio del socialismo o del anarquismo.

De este siglo, podemos destacar la crisis racional que se produce y el nuevo concepto de cultura además de nuevas formas de pensar. En la primera mitad de siglo muere el filósofo Kant, y la Filosofía se dirige hacia la teoría idealista de Hegel, que valora bastante las fuerzas del espíritu y se preocupa mucho por la historia. Después, Compte introducirá una reacción filosófica positiva que tiene su origen en los hechos observables, esto supondrá una nueva manera del pensar.

En la parte científica se realizarán grandes progresos, en especial en la Física, Medicina y Biología (evolucionismo de Darwin). Ya en la segunda mitad, las ciencias sociales como la Psicología y la Sociología comenzarán a tener un gran interés y tendrán gran influencia en la Literatura.

En la literatura se viven tres grandes movimientos durante el s. XIX en España y en toda Europa: Romanticismo, Realismo y Naturalismo.

España en el s. XIX

El inicio político de esta etapa de la historia española se a considerado la Guerra de la Independencia contra la invasión napoleónica, la cual despertó el patriotismo. Mientras se desarrollaba la guerra, se redactó la primera Constitución liberal aprobada por las Cortes de Cádiz en 1812, pero solo durará hasta la llegada al poder de Fernando VII, quien rechazará esta Constitución e iniciará un periodo de absolutismo, que durará hasta 1833, año en el que muere. Es una época de retroceso cultural y social, en el que los intelectuales son exiliados y no hay libertad de expresión.

A la muerte del Rey, se produce una división entre los partidarios de Isabel II , hija del monarca y menor de edad, y Don Carlos, hermano del rey y de tendencia más conservadora. A esto se sucede una guerra civil, la guerra carlista, entre estos dos bandos. Esta división permanecerá a lo largo del siglo y se reflejará en la literatura de la época.

Tras un periodo de regencias, en 1843 Isabel II subirá al trono, pero en 1868 una revolución popular destronará a la reina y se proclamará un nueva Constitución. La lucha carlista sigue y la crisis político-social empeora.

Al final del corto reinado de Amadeo I de Saboya, en 1873, en España se proclama la República. Esta etapa conflictiva no terminará hasta la llegada de Alfonso XII quien inicia la Restauración.

En el poder hay enfrentamientos entre liberales y conservadores, y se producen guerras en Cuba, Marruecos y Filipinas, donde se pierden las últimas colonias españolas.








El Realismo

Es un movimiento cultural que se da principalmente durante la segunda mitad del s. XIX en toda Europa. Esta nueva manera de ver las cosas se inicia hacia 1850 en Francia , con la publicación de la revista “Realisme” que define los rasgos más característicos de este movimiento.

Las novelas realistas se escriben desde los años treinta pero el Realismo como escuela no se consolida hasta la década de los cincuenta, con la Revolución de 1868, en que van tomando cuerpo las posiciones antirrománticas o superadoras del Romanticismo.

Asigna como fin a las obras artísticas o literarias la imitación fiel de la naturaleza, cuyo auge se da en Europa en la segunda mitad del siglo XIX.

Características del Realismo

Aparece una rigurosa observación de la realidad como método descriptivo, influido por las ciencias experimentales; los escritores se documentan sobre el terreno, tomando minuciosos apuntes sobre el ambiente, las gentes, la indumentaria, etc. También buscan en los libros los datos necesarios para conseguir la exactitud ambiental o psicológica.

Utilización de una técnica objetiva frente al subjetivismo romántico. El autor es un cronista aunque en ocasiones exponga algunas opiniones personales.

Intención social de los escritores. Se intenta descubrir las lacras o cualidades, manías y hasta deformidades sociales y contribuir a eliminarlas; renace la idea del “Arte útil”.

En el estilo se observa una progresiva eliminación de la retórica grandilocuente de los románticos, se adapta el lenguaje a la condición social del personaje. De ahí la importancia que adquiere el reflejo del habla popular .

El novelista refleja ampliamente la sociedad contemporánea. Se recoge una gran diversidad de ambientes. Entran ahora en la novela sectores sociales como los medios burgueses o las capas inferiores de la sociedad.

Como conclusión el Realismo desarrolla elementos románticos: el costumbrismo, el gusto por lo local y regional; sin embargo, elimina algunas facetas anteriores como el subjetivismo, el uso exagerado de la imaginación o la evocación constante del pasado legendario.

Los Temas

Principalmente están derivados de la mentalidad burguesa: el poder, el dinero, la influencia social o las cuestiones políticas del momento.

Los Personajes

Reflejan los cambios y tensiones sociales, aparecen proletarios, mendigos, políticos y la clase media.

La Novela realista

Durante la segunda mitad del s. XIX se desarrolla una prosa periodística, la llamada prensa obrera, cuenta las tensiones sociales de la época. Más tarde florece la prosa científica y humanística, pero el verdadero esplendor de este género se da con la novela.

En la novela se consiguió dar una visón completa de la sociedad en un determinado tiempo histórico : los personajes, los ambientes, los problemas, … formando un mundo verosímil y cotidiano. El novelista se convierte en el portavoz de la conciencia colectiva, consiguiendo una buena conexión entre novelista y sociedad.

Características de la Novela Realista :

El tema principal de la novela es el conflicto entre el individuo y la sociedad. Se intenta conocer el motivo de la marginación del personaje dentro de la sociedad.

El centro de la novela es el personaje, que reúne y expresa los rasgos generales de su grupo social. Se consigue un retrato casi perfecto del personaje, no solo físico sino también moral ; utilizando las técnicas de exploración de la alma humana como el monólogo interior y el estilo indirecto libre.

Hay una variada pintura de ambientes, principalmente costumbristas ; reuniones en casinos, paseos callejeros, culto religioso, fiestas populares, etc.

Es una representación total de la vida, eliminando lo fantástico. El autor muestra las miserias e intereses humanos de la época, convirtiéndose en crítico y juez, intentando mejorar la sociedad.

realismo

Realismo literario

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El Realismo literario es una corriente inventada por el escritor y contertulio francés Jules Champfleury (1821-1889), quien por primera vez definió su arte como realista. El realismo literario se halla inscrito de un movimiento más amplio que afecta también a las artes plásticas, al cine (Neorrealismo), a la fotografía (que surge con el siglo XIX), y a la filosofía de la ciencia (Karl Popper y Mario Bunge). Las obras realistas pretenden testimoniar documentalmente la sociedad de la época y los ambientes más cercanos al escritor, en oposición a la estética del Romanticismo, que se complacía en ambientaciones exóticas y personajes poco corrientes y extravagantes. La estética del Realismo, fascinada por los avances de la ciencia, intenta hacer de la literatura un documento que nos pueda servir de testimonio sobre la sociedad de su época, a la manera de la recién nacida fotografía. Por ello describe todo lo cotidiano y típico y prefiere los personajes vulgares y corrientes, de los que toma buena nota a través de cuadernos de observación, a los personajes extravagantes o insólitos típicos del anterior Romanticismo. Esta estética propugna a su vez una ética, una moral fundamentada en la moderación y síntesis de cualquier contradicción, la objetividad y el materialismo.
En cuanto a los procedimientos literarios del Realismo, son característicos el abuso de la descripción detallada y prolija, enumeraciones y sustantivos concretos; el uso del párrafo largo y complejo provisto de abundante subordinación, la reproducción casi magnetofónica del habla popular, tal cual se pronunciaba y sin corrección alguna que pretenda idealizarla, y el uso de un estilo poco caracterizado, un lenguaje "invisible" que exprese personajes, hechos y situaciones objetivamente sin llamar la atención sobre el escritor.
Al igual que el Romanticismo, el Realismo tuvo dos corrientes, una conservadora, que alababa las viejas costumbres populares (José María de Pereda, Juan Valera, Gustave Flaubert) y otra progresista, caracterizada por la denuncia social (Benito Pérez Galdós, Leopoldo Alas «Clarín»).
[editar]Características

Los rasgos fundamentales del Realismo son los siguientes:
Procura mostrar en las obras una reproducción fiel y exacta de la realidad.
Hace un uso minucioso de la descripción, para mostrar perfiles exactos de los temas, personajes, situaciones e incluso lugares; lo cotidiano y no lo exótico es el tema central, exponiendo problemas políticos, humanos y sociales.
Rechaza el sentimentalismo, muestra al ser humano objetivamente pues da toques de una realidad dura.
El lenguaje utilizado en las obras es coloquial y crítico, ya que expresa el habla común y corriente.
Así como rechaza lo sentimental, de igual forma lo espiritual, dando como resultados toques individualistas.
Las obras muestran una relación mediata entre las personas y su entorno económico y social, del cual son exponente; la historia muestra a los personajes como testimonio de una época, una clase social, un oficio, etc.
Temas relacionados con los problemas de la existencia humana.
El autor analiza, reproduce y denuncia los males que aquejan a su sociedad.
Transmite ideas de la forma más verídica y objetiva posible.
==Evolución del realismo europeo El origen del realismo literario europeo hay que buscarlo en la literatura española medieval y la novela picaresca española y, en concreto, en la versión que configuró sobre esa tradición el novelista Miguel de Cervantes. El desmitificador modelo cervantino influyó poderosamente en la literatura europea posterior, pero el descrédito por el que pasó el género narrativo durante el siglo XVIII aplazó su influjo europeo hasta bien entrado el siglo XIX, salvo en el caso de Inglaterra, que en el siglo XVIII comenzó su propio realismo de la mano de Henry Fielding y Tobias Smollett, y del que buena parte de los escritores realistas posteriores son deudores...
La novela realista europea viene a ser la épica de la clase media o burguesa que ha conseguido —a lo largo de sucesivas revoluciones que le han ido confiriendo cada vez mayor poder (1789, 1820, 1830 y 1848)—, instalarse como clase dominante en todos los aspectos de la vida, incluido el cultural y el estético. Los ideales burgueses (materialismo, utilitarismo, búsqueda del éxito económico y social) irán apareciendo en la novela poco a poco, y en su fase final también irán apareciendo algunos de sus problemas internos (el papel de la mujer instruida y sin embargo desocupada; el éxodo del campo a la ciudad y la mutación de valores subsecuente, por ejemplo). Por otra parte, cuando se vayan reiterando y agotando los temas relativos a la burguesía, la descripción realista irá penetrando en otros ámbitos y dejará la mera descripción externa de las conductas para pasar a la descripción interna de las mismas, transformándose en novela psicológica y generando procedimientos narrativos introspectivos como el monólogo interior. Todo ello posibilitó la aparición de movimientos en cierta manera opuestos, como el Espiritualismo, por un lado, visible en la última etapa de narradores realistas como Benito Pérez Galdós, Fiódor Dostoievski y León Tolstói, y el Naturalismo, por otro, que exageraba los contenidos sociales, documentales y científicos del Realismo, aproximándose a la descripción de las clases humildes, marginadas y desfavorecidas. Los autores tratarán de ofrecer personajes y situaciones comunes, lo que convierte a la obra literaria en una fuente de primer orden para el conocimiento del pasado histórico, aun teniendo en cuenta las precauciones que deben tomarse para un uso documental de las fuentes literarias.
En Francia fueron escritores realistas Henri Beyle, "Stendhal", Honoré de Balzac, Prosper Merimée, Gustave Flaubert y Victor Hugo. En el Reino Unido, William Makepeace Thackeray, Charles Dickens y Mary Ann Evans (mejor conocida por su seudónimo, George Eliot); en Rusia, Iván Turguéniev, Leo Tolstói y Fiódor Dostoievski. En Estados Unidos, Mark Twain, Henry James y Theodore Dreiser. En Italia, el movimiento se denominó Verismo y tiene a su más caracterizado representante en Giovanni Verga. En cuanto a la literatura escrita en alemán, es un movimiento de este sesgo el llamado Biedermeier y pueden considerarse realistas los novelistas suizos Albert Bitzius (que utilizaba el seudónimo Jeremías Gotthelf), Gottfried Keller, Conrad Ferdinand Meyer, el austríaco Adalbert Stifter y los alemanes Friedrich Hebbel (dramaturgo), Theodor Storm, Theodor Fontane, Gustav Freytag y Wilhelm Raabe, aunque esta estética todavía continuó renovándose durante el siglo XX a través de la obra literaria de Thomas Mann.

Origen del realismo.
Los cambios sociales que se produjeron a mediados del siglo XIX dieron lugar a una nueva corriente literaria, caracterizada por la representación objetiva de la realidad, llamada Realismo.
El Realismo tuvo su origen en circunstancias sociales de la 2ª mitad del S. XIX. Su nacimiento está ligado al ascenso al poder de la burguesía y a la nueva sociedad urbana que se formó como consecuencia del desarrollo industrial. La clase media adquirió importancia como fuerza social e impuso sus gustos en materia literaria, la mayor parte de los lectores pertenecían a esta clase.
El público estaba interesado por los problemas de la sociedad contemporánea, una sociedad que proporcionaba las ventajas del progreso, pero también problemas hasta entonces desconocidos. En este contexto es imprescindible el auge del realismo como técnica y de la prosa narrativa como modelo que permitía reconstruir la realidad y dejaba libertad al escritor para elegir temas, personajes y situaciones. La novela, que gozaba ya por entonces de cierta popularidad, se convirtió en el género en el que se alcanzaron los mayores logros del Realismo.
El Realismo coincide con el desarrollo de la sociedad burguesa y los cambios sociales e ideológicos que se produjeron como consecuencia de la revolución industrial y comercial llevada a cabo en el S. XIX.
La libertad política y religiosa, la soberanía popular, el sufragio universal y las reivindicaciones sociales fueron motores que desde ese momento movilizaron en toda Europa a las masas de trabajadores y las impulsaron a participar en los acontecimientos políticos. Doctrinas como el socialismo y el marxismo tuvieron una rápida aceptación y contribuyeron a crear entre los obreros una viva conciencia de clase.
La clase media salió fortalecida de estos cambios. Adquirió poder material, intelectual y moral, y pasó a desempeñar una función rectora es la sociedad. Pero también cobro un impulso imparable el movimiento obrero, que prendió con gran fuerza entre el proletariado urbano, surgido como consecuencia de la revolución industrial, sometido a condiciones de trabajo infrahumanas y que sobrevivía a duras penas en las ciudades. Cuando este proletariado adquirió conciencia de clase entró en pugna con la burguesía, que de ser clase revolucionaria que lucha contra el Antigua Régimen pasó a ser clase dominante y conservadora.

La literatura realista
El Realismo supuso una ruptura con el Romanticismo, tanto en los aspectos ideológicos como en lo formales. En ideas, los escritores dejaron de centrarse en sí mismos y pusieron su interés en la sociedad, observando y describiendo objetivamente los problemas sociales. En cuanto a la forma, intentaron reflejar fielmente la realidad, y para ello se valieron de la novela. Y en cuanto a la expresión prefirieron un estilo más sencillo, sobrio y preciso, en el que adquirió relevancia la reproducción del habla coloquial, es decir, niveles de lenguaje según los personajes, especialmente en diálogos.

neoclacisismo





Orígenes

Con el deseo de recuperar las huellas del pasado se pusieron en marcha expediciones para conocer las obras antiguas en sus lugares de origen. La que en 1749 emprendió desde Francia el arquitecto Jacques-Germain Soufflot, dio lugar a la publicación en 1754 de las Observations sur les antiquités de la ville d'Herculaneum, una referencia imprescindible para la formación de los artistas neoclásicos franceses. En Inglaterra la Society of Dilettanti (Sociedad de Amateurs) subvencionó campañas arqueológicas para conocer las ruinas griegas y romanas. De estas expediciones nacieron libros como las Antigüedades de Herculano (1757-1792) financiada por el Rey de Nápoles (luego Carlos III de España), que sirvieron de fuente de inspiración para los artistas de esta época.
También hay que valorar el papel que desempeñó Roma como lugar de cita para viajeros y artistas de toda Europa e incluso de América. En la ciudad se visitaban las ruinas, se intercambiaban ideas y cada uno iba adquiriendo un bagaje cultural que llevaría de vuelta a su tierra de origen. Allí surgió en 1690 la llamada Academia de la Arcadia o Arcades de Roma, que con sus numerosas sucursales o coloniae por toda Italia y su apuesta por el equilibrio de los modelos clásicos y la claridad y la sencillez impulsó la estética neoclásica.
La villa romana se convirtió en un centro de peregrinaje donde viajeros, críticos, artistas y eruditos acudían con la intención de ilustrarse en su arquitectura clásica. Entre ellos estaba el prusiano Joachim Winckelmann (1717-1768), un entusiasta admirador de la cultura griega y un detractor del rococó francés; su obra Historia del Arte en la Antigüedad (1764) es una sistematización de los conocimientos artísticos desde la antigüedad a los romanos.

...En Roma también trabajaba Giovanni Battista Piranesi (1720-1778); en sus grabados, como Antichitá romana (1756) o Las cárceles inventadas (1745-1760), y transmite una visión diferente de las ruinas con imágenes en las que las proporciones desusadas y los contrastes de luces y sombras buscan impresionar al espectador.
El trabajo está cargado de simbolismo: la figura en el centro representa la verdad rodeada por una luz brillante (el símbolo central de la iluminación). Dos otras figuras a la derecha, la razón y la filosofía, están rasgando el velo que cubre verdad.
La Ilustración representaba el deseo de los filósofos de la época de Razón (filosofía) racionalizar todos los aspectos de la vida y del saber humanos. Vino a sustituir el papel de la religión (como organizadora de la existencia del hombre) por una ética laica que ordenará desde entonces las relaciones humanas y llevará a un concepto deísta de la verdad.
[editar]Arquitectura

Artículo principal: Arquitectura Neoclásica


Cenotafio para Isaac Newton.


Puerta de Brandeburgo.


Fachada de la Catedral de Pamplona.


Representación de la Acrópolis de Atenas. Obra del arquitecto y pintor Leo von Klenze (detalle).


La arquitectura puede ser analizada como una rama de las artes social y moral; La Enciclopedia le atribuyó la capacidad de influir en el pensamiento y en las costumbres de los hombres. Proliferan así las construcciones que pueden contribuir a mejorar la vida humana como hospitales, bibliotecas, museos, teatros, parques, etc., pensadas con carácter monumental. Esta nueva orientación hizo que se rechazara la última arquitectura barroca y se volvieran los ojos hacia el pasado a la búsqueda de un modelo arquitectónico de validez universal.
...Nacen movimientos de crítica que propugnan la necesidad de la funcionalidad y la supresión del ornato en los edificios. Francesco Milizia (1725-1798) en Principi di Architettura Civile (1781) extendió desde Italia las concepciones rigoristas a toda Europa. Mientras, en Francia, el abate Marc-Antoine Laugier (1713-1769) propugna en sus obras Essai sur l'Architecture (1752) y Observations sur l'Architecture (1765) la necesidad de crear un edificio en el cual todas sus partes tuvieran una función esencial y práctica y en el que los órdenes arquitectónicos fueran elementos constructivos y no sólo decorativos, todo ello para hacer una arquitectura verdadera: la construida con lógica.
Todos los arquitectos parten de unos supuestos comunes como son la racionalidad en las construcciones y la vuelta al pasado. Los modelos de los edificios de Grecia y Roma e incluso de Egipto y Asia Menor se convierten en referentes que todos emplean aunque desde puntos de vista distintos.
Los modelos greco-romanos dieron lugar a una arquitectura monumental que reproduce frecuentemente el templo clásico para darle un nuevo sentido en la sociedad civil. El perfil de los Propileos de Atenas le sirvió al alemán Carl Gotthard Langhans para configurar su Puerta de Brandeburgo en Berlín (1789 a 1791),1 un tipo muy repetido como atestigua la entrada al Downing College de Cambridge (1806) obra del inglés William Wilkins o la posterior Gliptoteca de Múnich de Leo von Klenze.2
También el inglés James Stuart (1713-1788), un arquitecto arqueólogo al que se ha llamado el Ateniense, en su monumento a Lisícrates en Staffordshire, reprodujo el monumento corágico de Lisícrates en Atenas. Los hermanos Adam extendieron por toda Inglaterra un modelo decorativo para interiores con temas sacados de la arqueología; una de sus obras más representativas es Osterley Park, con una notable estancia etrusca y un clásico hall de entrada (1775-80).
Italia prefirió recrear sus modelos antiguos ya bien avanzado el siglo XVIII y en los comienzos del siglo XIX. El modelo del Panteón de Agripa en Roma se repite en un gran número de templos, como el de la Gran Madre de Dio en Turín y San Francisco de Paula en Nápoles, ambos terminados en 1831, que reproducen el pórtico octástilo y el volumen cilíndrico del Panteón.
Otros arquitectos, los llamados utópicos, revolucionarios o visionarios, plantearon edificios basados en las formas geométricas. No despreciaron la herencia del pasado clásico y, aunque respetaron las normas de simetría y la monumentalidad, sus edificios son a veces el resultado de la combinación caprichosa de las formas geométricas. Étienne-Louis Boullée (1728-1799) y Claude-Nicolas Ledoux (1736-1806) encabezaron esta postura; entre la gran cantidad de proyectos no construidos merece la pena mencionar el Cenotafio para Isaac Newton concebido por Boullée como una esfera, representación del modelo ideal, levantada sobre una base circular que había de cobijar el sarcófago del científico. Ledoux ha dejado edificios construidos, entre ellos una parte de la utópica ciudad industrial de las Salinas de Arc-et-Senans, de planta circular en el Franco Condado o el conjunto de la Villette en París.
...Entre uno y otro grupos aparece una tercera categoría, la arquitectura pintoresca, a partir de la creación de jardines ingleses en el siglo XVIII, ordenados de forma natural lejos del geometrismo del jardín francés. En esta arquitectura se valora la combinación de la naturaleza con lo arquitectónico, la inclusión en el paisaje natural de edificios que remedan las construcciones chinas, indias o medievales. Este juego de formas caprichosas y el aprovechamiento de la luz buscan suscitar sensaciones en el espectador. Horace Walpole (1717-1797) construyó en Londres (Inglaterra), Strawberry Hill (1753-1756) una fantasía gótica de la que su autor dijo que le había inspirado para escribir una novela gótica, una expresión del efecto inspirador de la arquitectura. También William Chambers (1723-1796) creó un conjunto pintoresco en los Jardines de Kew (Londres) (1757-1763) con la inclusión de una pagoda china que reflejaba su conocimiento de las arquitecturas orientales.
[editar]Escultura

Artículo principal: Escultura neoclásica
También en la escultura neoclásica pesó el recuerdo del pasado, muy presente si consideramos el gran número de piezas que las excavaciones iban sacando a la luz, además de las colecciones que se habían ido formando a lo largo de los siglos.
Las esculturas neoclásicas se realizaban en la mayoría de los casos en mármol blanco, sin policromar, puesto que así se pensaba que eran las esculturas antiguas, predominando en ellas la noble sencillez y la serena belleza que Winckelmann había encontrado en la estatuaria griega. En este mismo sentido habían ido las teorías de Gotthold Ephraim Lessing (1729-1781) que en su libro Laocoonte, o de los límites de la pintura y de la poesía (1766) había tratado de fijar una ley estética de carácter universal que pudiera guiar a los artistas; sus concepciones sobre la moderación en las expresiones y en el plasmado de los sentimientos son reglas que adoptará el modelo neoclásico.
Así, los escultores de fines del siglo XVIII y comienzos del XIX, crearán obras en las que prevalecerá una sencillez y una pureza de líneas que los apartará del gusto curvilíneo del Barroco. En todos ellos el desnudo tiene una notable presencia, como deseo de rodear las obras de una cierta intemporalidad. Los modelos griegos y romanos, los temas tomados de la mitología clásica y las alegorías sobre las virtudes cívicas llenaron los relieves de los edificios, los frontones de los pórticos y los monumentos, como arcos de triunfo o columnas conmemorativas.
El retrato también ocupó un importante lugar en la escultura neoclásica; Antonio Canova (1757-1822) representó a Napoleón como Marte (1810, Milán) y a su hermana Paulina como Venus Victrix (1807, Roma) tomando así los modelos de los dioses clásicos. No obstante otros prefirieron un retrato idealizado pero al tiempo realista que captara el sentimiento del retratado, como Jean-Antoine Houdon (1741-1828) con su Voltaire anciano (Museo del Hermitage) o el bello busto de la Emperatriz Josefina (1806, Castillo de Malmaison) de Joseph Chinard (1756-1813).
Antonio Canova (1757-1822) y Bertel Thorvaldsen (1770-1844) resumen las distintas tendencias de la escultura neoclásica. Mientras Canova llega al clasicismo desde una formación barroca y configura un estilo de gran sencillez racional, el danés Thorvaldsen siguió más directamente las teorías de Winckelmann hasta conseguir un estilo voluntariamente distante y frío que debe mucho a la estatuaria griega. Su Jasón o Marte y el Amor reflejan esa fidelidad al modelo griego.
[editar]Pintura

Artículo principal: Pintura neoclásica


La fuente, obra de Ingres.
Es estética neoclásica. Obras como el Juramento de los Horacios plantean un espacio preciso en el que los personajes se sitúan en un primer plano; el predominio del dibujo. Jean Auguste Dominique Ingres (1839-1867) aunque no fue un pintor neoclásico, tiene obras -como La Fuente- que representan este movimiento artístico.
Los pintores, entre los que destacó Jacques-Louis David, reprodujeron los principales hechos de la revolución y exaltaron los mitos romanos, a los que se identificó con los valores de la revolución.
[editar]Música

Artículo principal: música neoclásica
Después de la Segunda Guerra Mundial varios compositores (como Ígor Stravinski y Paul Hindemith) realizaron composiciones donde se notaba un retorno a los cánones del clasicismo de la escuela de Viena (de Haydn y Mozart), aunque con una armonía mucho más disonante y rítmicas irregulares. Ese movimiento musical se denominó "neoclasicismo".
Según la musicología actual, el término "música clásica" se refiere únicamente a la música del clasicismo (1750-1827 aprox.), inspirada en los cánones estéticos grecoromanos de equilibrio en la forma y moderación en la dinámica y la armonía.
Comúnmente se llama "música clásica" al tipo de música que se contrapone a la música popular y a la folclórica. Esto puede comprobarse en los medios de comunicación, en las revistas de divulgación musical y los folletos que acompañan a los CD de música académica. Para definir ese tipo de música que se relaciona con los estudios en conservatorios y universidades, los musicólogos prefieren el término "música académica" o "música culta".
Como los antiguos griegos y romanos no pudieron inventar maneras de conservar la música (mediante soportes gráficos como partituras o soportes sonoros como grabadores), el neoclasicismo de los siglos XVIII y XIX como resurgimiento de las artes clásicas grecorromanas (arquitectura, escultura, pintura) no alcanzó a la música. De todos modos los músicos de fines del siglo XVIII, influenciados sin duda por el arte y la ideología de la época, trataron de generar un estilo de música inspirado en los cánones estéticos grecorromanos:
notable maestría de la forma,
moderación en el uso de los artificios técnicos (en el barroco el contrapunto y la armonía habían llegado a un punto que el público consideraba extravagante),
suma reserva en la expresión emocional.
Véase también: Música docta
[editar]Literatura

Véanse también: Literatura española de la Ilustración y Neoclasicismo hispanoamericano
La Ilustración fue un movimiento intelectual que provocó que el siglo XVIII fuera conocido como el «Siglo de las Luces». El culto a la razón promovido por los filósofos ilustrados conllevó un rechazo del dogma religioso, que fue considerado origen de la intolerancia, y una concepción de Dios que pasaba de regir el mundo mediante las leyes naturales a desaparecer en concepciones ateas del universo. Los ilustrados promovieron la investigación de la naturaleza, el desarrollo científico-técnico, la educación y la difusión general de todo tipo de conocimientos; fueron los tiempos de L'Encyclopédie. El arte se hizo así más accesible y con menos pretensiones, y la literatura se dirigió a un público más amplio, planteándose como un instrumento social. El aumento del número de lectores, especialmente entre la burguesía, plantea la figura del escritor como un profesional, y la escritura como su fuente principal o secundaria de sustento.3
Francia fue la primera en reaccionar contra las formas barrocas, y los tres grandes ilustrados, Voltaire, Montesquieu y Rousseau se cuentan entre sus principales exponentes. También destacaron Pierre Bayle, Denis Diderot, George Louis Lecler y Chamblain de Marivaux. En Inglaterra tuvo una gran cantidad de adeptos la novela de aventuras, destacando Daniel Defoe, Jonathan Swift, Samuel Richardson y Henry Fielding, junto a los poetas John Dryden y Alexander Pope.4
De la novela se pasó al ensayo como género divulgador de ideas por excelencia. La literatura neoclásica realizó una crítica de las costumbres, incidiendo en la importancia de la educación, el papel de la mujer y los placeres de la vida.5 Destacaron en España el fraile benedictino Benito Jerónimo Feijoo, Gaspar Melchor de Jovellanos y José Cadalso.
Cobró importancia la fábula, relatos o poesías normalmente ejemplificadas con animales, donde se exponen enseñanzas morales. La fábula se caracterizaba por ser una composición de carácter didáctico, por la crítica de vicios y costumbres personales o de la sociedad, y por la recurrencia a la prosopopeya o personificación. Es el subgénero que más se adaptó a las preceptivas neoclásicas: una composición sencilla en la que la naturaleza interviene, y que enseña divirtiendo. Destacaron los fabulistas Félix María de Samaniego y Tomás de Iriarte en España, y el francés Jean de la Fontaine.6
En España, hubo una continuidad barroca en la poesía, con autores como Diego de Torres y Villarroel, que consideraba a Quevedo su maestro; Gabriel Álvarez de Toledo y Eugenio Gerardo Lobo. La segunda mitad del siglo XVII mostraba ya una poesía neoclásica, dominada por su admiración por la ciencia y los temas filosóficos, o centrada en temas anacreónticos y bucólicos, y marcada en ocasiones por el fabulismo. Destacaron Nicolás Fernández de Moratín, autor de Arte de las putas, prohibida por la Inquisición, que pudo inspirar los Caprichos de Goya; Juan Meléndez Valdés y José Cadalso, de la escuela salmantina; los fabulistas Iriarte y Samaniego en Madrid; en la escuela sevillana destacaron José Marchena, Félix José Reinoso, José María Blanco-White y Alberto Lista.7
Se dio también una fuerte influencia barroca en el teatro español, especialmente durante la primera mitad del siglo XVIII, con autores como Antonio de Zamora o José de Cañizares. El teatro en España tuvo cambios como la prohibición oficial de representar autos sacramentales, la reaparición del gusto popular por el sainete y la transición de los antiguos corrales a los teatros, como locales adecuados a la nueva concepción del teatro. A finales del primer tercio de siglo los dramaturgos españoles comienzan a seguir los modelos franceses, como Boileau y Racine, renovando las estéticas aristotélicas y horacianas. La obra de teatro debe ser verosímil, cumplir con las unidades de acción, de espacio y de tiempo, y tener un enfoque didáctico y moral. Destacaron en la tragedia Nicolás Fernández de Moratín, José Cadalso, Ignacio López de Ayala y Vicente García de la Huerta; en el más popular género del sainete, destacaron Antonio de Zamora, el prolífico Ramón de la Cruz e Ignacio González del Castillo. Destacó especialmente la figura de Leandro Fernández de Moratín, creador de lo que se ha dado en llamar «comedia moratiniana» (La comedia nueva o El café, El sí de las niñas), en que ridiculizaba los vicios y costumbres de la época, usando el teatro como vehículo para moralizar las costumbres. Seguidores de esta línea son también Manuel Bretón de los Herreros y Ventura de la Vega.8
Neoclasicismo
El momento de esplendor de la tendencia clasicista se remonta a finales del siglo XVII, pero sus influencias llegarán a la literatura ilustrada. Su estética se encuentra sintetizada en La poética de Boileau, publicada en 1674, y se basa en un sentimiento filtrado por el intelecto y en una referencia a "los antiguos" como clásicos dignos de imitación. Se niegan también los excesos del barroco y del rococó. En el teatro domina la regla aristotélica de las tres unidades: espacio, tiempo y acción, que limita cada espacio de acción a un sólo lugar y a un sólo día, mientras que en la poesía se impone el verso alejandrino de catorce sílabas, y formas clásicas como la fábula, la elegía y la égloga. Mas es precisamente en el siglo XVIII cuando las reglas clásicas son discutidas, coincidiendo el triunfo del neoclasicismo en las artes plásticas con su decadencia en la literatura.
[editar]Ilustración
La Ilustración se podría fechar entre el año 1689, en el que se publica el Ensayo sobre el entendimiento humano de John Locke y 1785, publicación de la obra de Goethe Las desventuras del joven Werther.
[editar]Características sobre el contenido
Han de señalarse los siguientes aspectos en lo referente a las preocupaciones y actitudes del hombre neoclásico, y sobre todo al contenido de su literatura:
Predomina la razón ante la emoción, imaginación y sensibilidad.
El carácter de las obras literarias es impersonal y colectivo, civil y moral.
La literatura tienen un fin útil para el hombre, pudiendo ser didáctico, moral o social. De ahí que se cree en Francia la Encyclopédie. El Emilio de Rousseau es además de una novela, un tradado de educación.
El laicismo, cuestionamiento de la religión y de sus instituciones en lo tocante a la libertad de los hombres.
Se cuestiona el poder político de las monarquías absolutas, y se defiende la participación del pueblo en la política. Esto puede verse en Los viajes de Gulliver de Jonathan Swift.
Se analizan y se critican los valores y costumbres adoptados por el pueblo. En la literatura se recurre a la opinión de un extranjero para estos análisis sociales, como en Las Cartas Marruecas del español José Cadalso, basadas en las Cartas Persas del francés Montesquieu.
Preocupación por la ciencia y sus aplicaciones en la vida real. Isaac Newton es alabado por los Ilustrados por ser el descubridor de la Ley de la gravedad.
La tolerancia se considera una virtud fundamental, en la religión y en la política.
La historia es una fuente de conocimiento muy recurrida para el hombre ilustrado.
[editar]Características formales
Como los renacentistas, se imitan a los clásicos, incorporando como modelo la tragedia y la comedia. En la poesía la estructura era similar a las églogas, las fábulas, la elegía, la épica o el himno. Voltaire intentara imitar la Eneida de Virgilio con su largo poema La Henriada.
Se sigue respetando la estética neoclásica en el teatro y en la poesía. En la prosa, aparece la novela, precedida anteriormente por El Quijote y la novela picaresca.
Se separan tajantemente los géneros, impidiendo mezclarse en una misma obra poesía y prosa, o tragedia y comedia.
Se valora más lo tradicional que lo novedoso, razón por la cual la novela no fue adaptada del todo a la literatura durante mucho tiempo.
Se valora también el término medio de las cosas, y el decoro en la forma de expersarse. La exageración les parece un acto hipócrita.
Primacía de lo natural y realista sobre lo fantástico.
La claridad es un valor literario.
La ironía y la parodia son recursos en la crítica y denuncia a los poderosos.
Uso del lenguaje culto, limpio y "literario", como metáforas, imágenes y figuras retóricas, siempre y cuando estén ya presente sen la literatura clásica.
El concepto de literatua en el período de la Ilustración, no se entendía como en la actualidad. Por literatura se encendía la capacidad y experiencia de leer, y era también todo el conjunto de libros que contuviena conocimiento, lo que incluía libros de filosofía, economía, ensayo e historia, y excluía a la novela.

neoclasicismo!!

Neoclasicismo hispanoamericano
El neoclasicismo o estilo neoclásico fue un movimiento cultural, artístico y literario que se desarrolló desde mediados del siglo XVIII hasta las primeras décadas del siglo XIX, en que después fue sustituido por el Romanticismo. Su origen viene de la reacción ante los "excesos" del barroco en el arte y especialmente el abuso decorativo de su última fase: el rococó. El neoclasicismo significó una vuelta a los contenidos grecorromanos y se buscaba nuevamente el equilibrio y la armonía entre los diferentes elementos.
En Hispanoamérica, tuvo gran influencia en la cultura y política. Creo gran interés por la libertad y la suerte de sus pueblos; las ideas liberales de lucha contra la tiranía y la intolerancia. Varias de las manifestaciones reconocidas son la poesía neoclásica y la poesía gauchesca que se originó más tarde.
[editar]Características y manifestaciones

El neoclasicismo en general es la recopilación de todas las escuelas literarias en la cual todo el mundo vivía en paz y todos eran lo suficientemente sabios para asumir su oscurantismo e igualdad.
El neoclasicismo trató de imitar a los griegos y romanos. Su principal característica es la belleza fría y sin alma. La sátira y la burla identificaban la prosa y el verso; algunos críticos nombraron esa literatura como prerrevolucionaria, por su intención y por haber antecedido a las guerras de la independencia americana. Todo esto se generó cuando comenzaron las críticas contra las autoridades que representaban la corona española.
La poesía neoclásica se distinguió principalmente por su lírica de contenido ligero, con temas sobre el amor, mitología, asuntos bíblicos, civiles y progresistas. También por el renacimiento de la fábula, el epigrama y otras composiciones festivas y moralizantes, introducción del paisaje y de personajes locales, incluyendo la flora y la fauna. Auge de la poesía patriota, en forma de odas e himnos heroicos, sobre hechos de las guerras de la independencia.
Además una entrada al léxico poético de voces regionales o populares y la aparición en el Río de la Plata de la poesía gauchesca, que se explicará más adelante. Hubo también una poesía revolucionaria, aunque de valor estético limitado. Ésta celebraba los triunfos de las armas americanas, enaltecía a los héroes de la guerra, promovía el entusiasmo nacional y atacaba a España, sus hombres y sus actos. Esta poesía se ha recogido en cancioneros, y algunas de las composiciones son anónimas, mientras que otras aparecen firmadas.
En la prosa, los fenómenos fueron los siguientes: el surgimiento del periodismo político, social y económico, como medio de difusión de la nueva ideología y revolución. Una preferencia por los ensayos, proclamas, historias y discursos; el nacimiento de la verdadera novela realista hispanoamericana en México José Joaquín Fernández de Lizardi. Un ejemplo de este género son los himnos nacionales escritos en este estilo. Aunque el periodismo fue la actividad literaria más inmediata y directa, la prosa revolucionaria es riquísima en memorias, autobiografías, cartas, discursos, artículos, ensayos, panfletos y traducciones. En el teatro, sin embargo, no hubo grandes novedades. Se representaban las comedias y tragedias del repertorio clásico español. Hubo, con todo, intentos de teatro popular, que pueden considerarse como los precursores de los teatros realistas locales. El monólogo o unipersonal tuvo bastante auge en esos momentos.
Los temas preferidos por los neoclásicos hispanoamericanos fueron de libertad y progreso inspirados por los generales Simón Bolívar, Sucre y José de San Martín. El máximo representante de la época es José Joaquín Olmedo (1780-1847), ecuatoriano que compuso una famosa obra que elogio a Simón Bolívar La victoria de Junín. También está José María Heredia (1803-1839), cubano y humanista, autor de dos célebres odas: En el teocalli de Cholula y Niágara.
[editar]Poesía Gauchesca

Una manifestación importante de la época fue la poesía gauchesca, que fue un género escrito por lo general en lenguage rústico y tiene como artista principal el gaucho. Este fenómeno literario, cultural y social es propio del Río de la Plata, en Argentina y Uruguay. Fue el uruguayo Bartolomé Hidalgo (1788-1823) al que se considera iniciador del género. Entre sus obras podemos citar Diálogos patrióticos o sus Cielitos. La poesía gauchesca nace hacia el siglo XVIII en el Río de la Plata, su difusión llega al último tercio del siglo XIX.
Refleja actitudes politicas como el culto por las armas, la habilidad del jinete y el sentimiento de libertad. Para algunos críticos, la antigua poesía tradicional y anónima de los gauchos tiene una base española popular (romances, coplas, canciones), ingresada en el Río de la Plata con los conquistadores y colonizadores, la cual fue repitiéndose de boca en boca, adaptándose a la realidad americana, hasta llegar a convertirse en la poesía de los gauchos argentinos. Los gauchos son los protagonistas de los poemas gauchescos y de las obras en prosa del mismo género. Acerca de este ejemplar social y humano, y de su papel histórico y su psicología, se ha debatido bastante, y se han escrito numerosas obras, ya sea para enaltecerlo o denigrarlo.

literatura del romanticismo!!!

CONCEPTO DE SU LITERATURA

El romanticismo es un movimiento literario que dominó la literatura europea desde finales del siglo XVIII hasta mediados del XIX. Se caracteriza por su entrega a la imaginación y la subjetividad, su libertad de pensamiento y expresión y su idealización de la naturaleza.
Llamado también "el mal del siglo"
Surge en Alemania a finales del siglo XVIII hasta 1918. Los autores románticos encuentran su primera fuente de inspiración en la obra de dos grandes pensadores europeos: el filósofo francés Jean-Jacques Rousseau y el escritor alemán Johann Wolfgang von Goethe.
ALEMANIA (Cuna del romanticismo): Alemania reaccionó tempranamente contra el neoclasicismo. Y en el siglo XVIII, un grupo de jóvenes poetas se unió bajo el lema Sturm und Drang, que significa tempestad e ímpetu, cuyo líder fue Johann Gottfried von Herder (1744-1803), filósofo y crítico literario alemán, cuyos escritos contribuyeron a la aparición del romanticismo alemán. Como líder del movimiento del Sturm und Drang (tormenta e impulso) inspiró a muchos escritores, entre ellos y muy especialmente a Johann Wolfgang von Goethe, principal figura del romanticismo alemán: Este grupo defendía ante todo la libertad del artista. Consideraba, además, que la literatura no debía perseguir ningún fin, excepto la belleza.
La razón impuesta como un valor fundamental por el neoclasicismo, fue también atacada. Así, para el Sturm und Drang, la genialidad del hombre no estaba en sus ideas si no en el poder de su imaginación; contrario al clasicismo, al que consideraba muy rígidos en sus principios normativos en la literatura.
Con los ideales de la revolución francesa, también se da en el arte, los ideales de: libertad y nacionalismo. Libertad frente a las reglas, frente al paganismo del neoclasicismo, con su libertad de arte de escribir y el nacionalismo y el cristianismo y en contra del paisaje greco latino: manso, bucólico y pastoril, surge el paisaje exótico, salvaje de ruinas y lugares sombríos.
Perdieron la confianza en la razón y establecieron que los sentimientos íntimos del hombre era lo único verdaderamente valioso.
El romántico del siglo XIX era fundamentalmente un soñador y quería cambiar el mundo y se identifica con las grandes causas humanas: libertad, patriotismo, justicia, etc.
En América se inicia en 1832 con la obra "Elvira" (La novia del plata) de Esteban Echevarría.
El término romántico se empleó por primera vez en Inglaterra en el siglo XVII con el significado original de 'semejante al romance', con el fin de denigrar los elementos fantásticos de la novela de caballerías muy en boga en al época.
Nacionalismo romántico y Literatura
El Romanticismo en literatura significa libertad, en la elección de la forma y en la elección del contenido. Se trata de una literatura revolucionaria por cuanto supone la liquidación de la norma clásica y la enemiga de los neoclasicistas. En Francia se dio la más cruenta batalla entre clásicos y románticos.
El declive del romanticismo
Hacia mediados del siglo XIX el romanticismo comienza a dar paso a nuevos movimientos literarios: los parnasianos y el simbolismo en la poesía y el realismo y el naturalismo en la prosa, pero siguió cultivándose en toda Europa y América, sin su carga original audaz, como un calco repetitivo y con gran éxito de lectores.
Su exagerado pesimismo y el plano de exagerado subjetivismo orientado siempre al pesimismo. Justificado en querer ser siempre los incomprendidos de la época.
Variantes:
1. Razón Social: (1830 - 1860) Denuncia los problemas de la sociedad. Esto es en la Revolución Francesa y una nueva sociedad para los pobres

2. Razón Artístico.

CAPÍTULO III

CARACTERÍSTICAS GENERALES y GÉNEROS LITERARIOS

Características los grandes temas románticos:

Con la difusión del movimiento romántico a los demás países de Europa, ciertos temas y actitudes, a menudo entremezclados, se sitúan en el centro de las preocupaciones de los escritores del siglo XIX.

a) Anhelo de libertad: se le entiende entre sentidos:

- Libertad artística: Ser creativos sin necesidades de las reglas reverenciadas por los rígidos neoclásicos.

- Libertad en el espacio: Impulsa al autor romántico a buscar la soledad o huir imaginariamente a países lejanos míticos, cuya vida y paisaje se pinta con devoción.

- Libertad en el tiempo: Conduce hacia el pasado a través del recuerdo o hacia el futuro por medio del ensueño. - Esto produce al romántico, una ola melancólica "Melancolía por que ya no tiene o melancolía por que aún no se tiene".

El romántico se concibe como un ser libre, el cual se manifiesta como un querer ser y un buscador de la verdad. No puede aceptar leyes ni sumisión a ninguna autoridad. Muchos románticos heredaron la crisis de la conciencia europea que la Ilustración provocó al cuestionar, en nombre de la razón, los dogmas religiosos.
b) Subjetivismo

Expresa libre y con mucha sinceridad su mundo interior, su yo personal, su ego: emociones, sentimientos, anhelos. Busca su originalidad en su propia intimidad. Manifiesta tristeza, melancolía y desesperación, por que el romántico es un ser fantasioso, cuyos deseos e ilusiones chocan constantemente con la realidad.
c) Predominio del sentimiento sobre la razón: Pone mayor pasión antes que racionalidad.

d) Nacionalismo: No solo exalta el yo personal, si no también el yo colectivo, "la religión de la patria". Surge así el interés y el gusto por las leyendas y tradiciones, de ahí su predilección por el medioevo, por lo popular y por todo lo que encarna más vivamente el espíritu nacional.

e) Revaloración de la naturaleza: Uno de los rasgos principales del romanticismo fue su preocupación por la naturaleza. El placer que proporcionan los lugares intactos y la (presumible) inocencia de los habitantes del mundo rural se observa por primera vez como tema literario en la obra 'Las estaciones' (1726-1730), del poeta escocés James Thomson. Esta obra se cita a menudo como una influencia decisiva en la poesía romántica inglesa y su visión idílica de la naturaleza, una tendencia liderada por el poeta William Wordsworth. El gusto por la vida rural se funde generalmente con la característica melancolía romántica, un sentimiento que responde a la intuición de cambio inminente o la amenaza que se cierne sobre un estilo de vida.

f) Valoración del medioevo: Se valoran los ideales medievales de honor caballeresco, de aventuras y de fe cristiana y figuración de la mujer amada.

g) Abarcó todos los géneros: Como corriente literaria encontró su expresión en la poesía, el teatro, la novela pero también renovó todos los géneros, como la historia, la música y la crítica, extendiéndose así mismo al campo de las bellas artes. Esa revolución literaria es Europea.

h) La pasión por lo exótico: Imbuidos de un nuevo espíritu de libertad, los escritores románticos de todas las culturas ampliaron sus horizontes imaginarios en el espacio y en el tiempo. Regresaron a la edad media en busca de temas y escenarios y ambientaron sus obras en lugares como las Hébridas de la tradición ossiánica, como en la obra del poeta escocés James MacPherson, o el Xanadú oriental evocado por Coleridge en su inacabado 'Kubla Jan' (c. 1797). Una obra decisiva fue la recopilación de antiguas baladas inglesas y escocesas realizada por Percy Thomas; sus Reliquias de poesía inglesa antigua (1765) ejercieron una influencia notable, tanto formal como temática, en la poesía romántica posterior. La nostalgia por el pasado gótico se funde con la tendencia a la melancolía y genera una especial atracción hacia las ruinas, los cementerios y lo sobrenatural.

i) El amor y la muerte: El romántico asocia amor y muerte, como ocurre en el Werther de Goethe. El amor atrae al romántico como vía de conocimiento, como sentimiento puro, fe en la vida y cima del arte y la belleza.

El romántico ama el amor por el amor mismo, y éste le precipita a la muerte y se la hace desear, descubriendo en ella un principio de vida, y la posibilidad de convertir la muerte en vida: la muerte de amor es vida, y la vida sin amor es muerte.
En el amor romántico hay una aceptación de la autodestrucción, de la tragedia, porque en el amor se deposita la esperanza en un renacer. En el amor se encarna toda la rebeldía romántica: "Todas las pasiones terminan en tragedia, todo lo que es limitado termina muriendo, toda poesía tiene algo de trágico" (Novalis). En la muerte, el alma romántica encuentra la liberación de la finitud.
j) El elemento sobrenatural: El gusto por los elementos irracionales y sobrenaturales figura entre las principales características de la literatura inglesa y alemana del periodo romántico. Esta tendencia se vio reforzada en un sentido por la desilusión con el racionalismo del siglo XVIII, y en otro por la recuperación de una abundante cantidad de literatura antigua (cuentos populares y baladas) realizada por Percy y los eruditos alemanes Jacob y Wilhelm Karl (Grimm) y el escritor danés Hans Christian Andersen o el español Gustavo Adolfo Bécquer, que tanto influyó en los poetas hispanoamericanos. A partir de estos materiales surge, por ejemplo, el motivo del doppelgänger (el doble). Muchos escritores románticos, especialmente los alemanes, se mostraron fascinados con este concepto, que en cierto modo refleja la preocupación romántica por la propia identidad. El poeta Heinrich Heine escribió un poema apócrifo titulado 'Der Doppelgänger' (1827); otra obra basada en el mismo tema es El elixir del diablo (1815-1816), una novela corta de E. T. A. Hoffmann; y lo mismo cabe afirmar de La increíble historia de Peter Schlemihl (1814), de Adelbert von Chamisso, un relato sobre un hombre que vende su sombra al diablo. Mucho tiempo después el gran maestro ruso Fiódor Mijáilovich Dostoievski escribió su famosa novela El doble (1846), un estudio sobre la paranoia de un modesto oficinista.

La coincidencia del periodo romántico con la revolución de independencia en Hispanoamérica favoreció la importación y amplia difusión del movimiento, pero no fue de "las ideas sino de los tópicos, no del estilo sino de la manera, del subjetivismo sentimental".

Los patriotas hispanoamericanos que vivieron en Londres, a principios de siglo, regresaron cargados de influencias y modelos. Las señas de identidad del romanticismo hispanoamericano fueron: nacionalismo, exaltación de lo autóctono, lucha por la libertad, denuncia social y moral.

k) La religión de los románticos:

Las posturas románticas acerca de la religión son variadas. No obstante, en general la creencia no la fundan los románticos en ninguna norma establecida, en ninguna moral instituida, sino en un sentimiento interior y en una intuición esencial de lo divino que conduce a una unión mística con Dios.
Para todos los románticos no existe Dios fuera del mundo y del hombre, y debemos actuar motivados por el entusiasmo y el amor ("sintiéndose lleno de Dios", F. Schlegel), una comunicación directa entre el hombre y la Naturaleza, el hombre y Dios, el Uno y el Todo.
CAPÍTULO IV

REPRESENTANTES MÁXIMOS


Friedrich von Schiller
ALEMANIA
Es uno da los más altos poetas de Alemania por la intensidad de pensamiento y por el dominio del lenguaje. En Guillermo Tell (1804), un oscuro montañés medieval se convierte en símbolo inmortal de la lucha contra la tiranía y el gobierno extranjero. Los bandidos.


Friedrish Holderin
Destinado a la carrera eclesiástica, estudiante en Tibinga conoce a Hegel y Schelling, rechaza la ordenación y se dedica a la enseñanza, sufre grave crisis de locura que le depararía la muerte.
Sus obras: Himno a la humanidad (1791) o Himno al amor (1791), "A las parcas", "Al dios del sol" "El aeda ciego". Siguió, por último, una poesía entre mística y simbólica de una gran profundidad y belleza, como El archipiélago (1800), El Rin (1802) o Recuerdo (1803), obra en la que ya se nota su mente trastornada.
Además de las poesías, Hölderlin escribió una novela epistolar Hyperion (2 volúmenes 1797-1799), una alegoría sobre la nación alemana en la que cuenta la historia de un luchador por la libertad griega, que derrotado por los turcos va a refugiarse a tierras centroeuropeas (Alemania); y la tragedia en verso inacabada Empédocles (1798-1799).
Friedrish Von Hardenberg
Este varón conocido literariamente como Novalis, estudió Derecho ejerciéndolo como asesor de minas, muerta su prometida, Sofía Von Kuhn, luego lo haría él también. Canciones espirituales (1799) , Enrique de Ofterdingen , Himnos de la noche, Enrique de Ofterdingen.
Henrish Heine
Se doctoró en leyes y lenguas clásicas, de raza hebrea, abjuró a su judaísmo y se hizo bautizar luterano. Fue a residir a París; con una pensión del gobierno. Una dolencia medular lo llevó a la tumba. Sus obras: Atta trol, Libro de los Cantares, Poemas, El viaje por el Harz, Libro de canciones, Cuadros de viaje, Historia de la religión y de la filosofía en Alemania, El rabino de Bacharach, Alemania, cuento de invierno, Romancero.
François René de Chateaubriand (1768-1848)
FRANCIA
Escritor y político francés, pionero del romanticismo, muy conocido por su autobiografía y la novela René. Su obra se caracteriza por el uso de la introspección. Su novela Atala (1801) lo convierte en precursor del romanticismo. Esta pintura de Pierre Delaval pertenece a una colección privada.
Alexandre Dumas padre (1802-1870)
Novelista y dramaturgo francés del periodo romántico, al que, a veces, se le llama Dumas padre dado que su hijo se llamaba igual y también fue escritor. Es uno de los escritores franceses más leídos, y conocido, ante todo, por sus novelas históricas Los tres mosqueteros (1844) y El conde de Montecristo (1844).


Walter Scott (1771-1832)
INGLATERRA
Creador de la novela histórica.
Sus obras: "Ivanhoe", "Rob roy", "El Pirata", "La dama del lago", "Anticuario", Juglaría de la frontera escocesa, El canto del último juglar, Marmion (1808), La dama del lago (1810), Rokeby (1813) y El señor de las islas (1815), Waverley (1814), Guy Mannering (1815), El viejo Mortalidad (1816), El corazón de Midlothian (1818), Rob Roy (1818), La novia de Lamermoor (1819), Ivanhoe (1820), Kenilworth (1821), Quentin Durward (1823) y La muchacha de Perth (1828), Vida de Napoleón Bonaparte.




George Gordon Byron - Lord Byron (1788-1824)
Hijo de un capitán y de una noble, hereda su titulo a los 10 años, educándose en Cambridge, viajó al Mediterráneo, tras un matrimonio desafortunado, sale de Inglaterra y muere incorporado a las tuerzas que luchaba por la independencia de Grecia.
Sus obras: "El Infiel", "Corsario", "Manfredo", "Childe Harold", El infiel (1813), La novia de Abydos (1813), El corsario (1814) y Lara (1814), Melodías hebreas, El prisionero de Chillon (1816), Manfred (1817), Don Juan (1818-1819), Beppo (1818), Caín y Sardanápalo, Mazeppa y La isla.


Charles Dickens
(1812-1870) Perteneciente ya a la ERA VICTORIANA, en la que dominaba el UTILITARISMO, identificado con el RACIONALISMO, Dickens, era hijo de un pobre empleado, pasó su infancia lleno de estrecheces debido a la pobreza y desempleo de su padre. Desde los 16 años se vinculó al periodismo que lo relacionó con la literatura.
Sus obras: "Oliver Twist", "Historia de dos ciudades", "David Copperfield" Papeles póstumos del club Pickwick , Canción de Navidad, La pequeña Dorritt (1855-1857), Grandes esperanzas (1860-1861) y Nuestro amigo común (1864-1865). Los lectores del siglo XIX, La tienda de antigüedades (1840-1841), Barnaby Rudge (1841), Martin Chuzzlewit (1843-1844), Dombey e hijo (1846-1848), Tiempos difíciles (1854), Historia de dos ciudades (1859) y El misterio de Edwin Drood.
Alessandro Manzoni (1785-1873)
ITALIA
Figura clave del romanticismo italiano.
"El conde de Carmagnola".
Obras: Los himnos sacros (1812-1815), La Resurrección, El Nombre de María, Navidad, La Pasión y Pentecostés, El cinco de mayo (1821) y Marzo 1821. También a este periodo pertenecen las tragedias románticas Conde de Carmagnola (1820) y Adelchi (1822), Los novios. Esta obra tuvo una primera publicación con el nombre de Fermo y Lucía, Historia de la colonia infame, Sobre la lengua italiana.
Giacomo Leopardi (1798-1837)
"Cantos", La aproximación de la muerte (1816), A Italia o En el monumento de Dante, Obras morales (1824-1832), "El infinito", "La tarde del día de fiesta", "A la luna", "El sueño" o "La vida solitaria", "Recuerdos", "La calma tras la tempestad", "El sábado en el pueblo", "Canto nocturno de un pastor errante en Asia", "El pájaro solitario", Cantos, "El pensamiento dominante" (1831), "Amor y muerte" (1832), "A sí mismo" (1833) y "Aspasia" (1834), Los nuevos creyentes, Palinodia al marqués Gino Capponi y Paralipómenos de la Batracomiomaquia, La ginestra (La retama, 1836), El ocaso de la luna (1837).


Alejandro Pushkin (1799-1837)
RUSIA
"Ruslán y Ludmila", ‘Oda a la libertad’, El prisionero del Cáucaso (1822), La fuente de Bajchisarai (1823) y Los cíngaros (1824), Eugene Onegin, Borís Godunov, Poltava (1828) y Los jinetes de bronce (1833), La hija del capitán (1836), La dama de picas.
Nicolas Gogol (1809-1852)
"La Feria", "Taras Bulba", "Las Almas Muertas", Veladas en el caserío de Dikanka (1831), Mirgórod (1835), El inspector, El capote.
Washington Irving (1783-1859)
NORTEAMERICA
Es considerado unánimemente, como el "Primer Gran Escritor Americano" debido a su delicada riqueza temática y su fino humor, su estilo posee colorido y sabor propio " Relatos de un viajero", "Rip van Winkle", "Las Cartas del caballero Jo nathan Oldstyle, Historia de Nueva York (1809), Historia de la vida y viajes de Cristóbal Colón (1828), Cuentos de la Alhambra (1832), Granada, Bracebridge Hall (1822), Cuentos de un viajero (1824), Crónica de la conquista de Granada (1829), Cuentos del antiguo Nueva York (1835), Oliver Goldsmith (1849).


Hernan Melville (1819-1891)
"Typee", Omoo (1847) y Mardi (1849), Redburn (1849), La guerrera blanca (1850). "Moby Dick" En el libro de relatos Cuentos de Piazza (1856), "Benito Cereno" y "Bartleby el escribiente", 'Las Encantadas', El timador (1857), Aspectos de la guerra (1866) y Clarel (1876), Billy Budd, marinero (1924).


Walt Whitman (1819-1892)
"Hojas de Hierba" (Canto a mi mismo), "Hijos de Adán" y "Calamus", Redobles de tambor, Secuela (1866), Perspectivas democráticas (1871), Días ejemplares (1882-1883).
Harriet Beecher Stowe (1881-1896)
La cabaña del Tío Tom, Claves a la cabaña del Tío Tom , protesta contra los abusos cometidos a los negros esclavos. El Mayflower, personajes entre los descendientes de los peregrinos, National Era, Dred: Relato del gran pantano sombrío (1856). El galanteo del ministro (1859), La auténtica historia de la vida de Lord Byron.
CAPÍTULO V

ROMANTICISMO ALEMÁN (1749 - 1832)

JOHANN WOLFGANG GOETHE

"El Genio de Weimar"

Fue el último de los Clásicos y el Primer Romántico Alemán.
Importancia:
Iniciador del romanticismo literario en Europa con su obra "Werther"
Figura más importante de la literatura alemana porque destacó en: Poesía, novela, drama, ensayo.
Fue un portentoso creador y nos ha dejado obras sobre las más diversas ramas del conocimiento humano (artes, ciencias, literatura, etc.).
Cultivó todos los géneros literarios y orientó el pre-romanticismo alemán.
Es considerado uno de los más grandes escritores de todas las épocas.
Poseía una amplísima cultura literaria y tuvo como modelos las más variadas obras y los más variados autores.
Mejor poeta del Siglo XIX dentro de las letras universales.
BIOGRAFÍA
Goethe nació el 28 de agosto de 1749 en Frankfurt del Main, hijo de un funcionario del gobierno. De 1765 a 1768 estudió Derecho en la Universidad de Leipzig; allí empezó a interesarse por la literatura y la pintura y conoció las obras dramáticas de sus contemporáneos Friedrich Gottlieb Klopstock y Gotthold Ephraim Lessing. La influencia de estos autores y su amor por la hija de un comerciante de vinos, en cuya taberna solía cenar, se reflejan en su poesía más temprana y en sus primeras obras dramáticas. Entre estas obras primerizas se encuentran una comedia en verso de un acto, El capricho del enamorado (1767), y una tragedia en verso, Los cómplices (1768).

Goethe enfermó en Leipzig y volvió a Frankfurt, donde, durante la convalecencia, estudió ocultismo, astrología y alquimia. A través de la influencia de una amiga de su madre, Katharina von Klettenberg, que era miembro del movimiento de reforma luterano conocido como pietismo, Goethe se introdujo en el misticismo religioso. De 1770 a 1771, estuvo en Estrasburgo para proseguir sus estudios de Derecho; además profundizó en los estudios de música, arte, anatomía y química.

PRIMERAS AMISTADES
En Estrasburgo, Goethe hizo dos amistades, que tuvieron una enorme repercusión en sus obras literarias. Una fue la de Friederike Brion, la hija de un pastor religioso de la ciudad de Sesenheim que le inspiró la mayoría de sus personajes femeninos, incluso el de Gretchen de su drama poético Fausto. La otra amistad, que más tarde reconoció como la experiencia intelectual más estimulante de su juventud, fue la del filósofo y crítico literario Johann Gottfried von Herder. Por esta influencia, Goethe se hizo un escéptico sobre la validez de los preceptos del clasicismo francés que dominaban sin discusión en la Alemania de la época, incluidos los de las tres unidades dramáticas —lugar, tiempo y espacio— que la escuela teatral francesa había adoptado del antiguo teatro griego. Herder le enseñó también a apreciar las obras de Shakespeare, en las que las unidades clásicas se sustituyen por el placer de la expresión directa de las emociones, y a darse cuenta del valor de la poesía popular y de la arquitectura gótica alemanas como fuentes de inspiración.
El resultado fue que, Goethe, después de graduarse en Derecho y volver a Frankfurt para ejercerlo, escribió la tragedia Götz von Berlichingen (1773). La obra, inspirada en las de Shakespeare, es una adaptación de la historia de un caballero alemán que se hizo bandido en el siglo XVI; las acciones de bandidaje exitosas de su protagonista son interpretadas como una revuelta popular nacional alemana contra la autoridad del emperador y la Iglesia en la primera mitad del siglo XVI. Götz von Berlichingen tuvo enormes repercusiones en la historia literaria alemana. Junto al manifiesto Sobre el estilo y el arte alemán (1773), al que contribuyeron Goethe, Herder (con dos ensayos en los que elogiaba a Ossián y a Shakespeare) y otros, Götz inauguró el importante movimiento literario alemán conocido como Sturm und Drang (tormenta e impulso), precursor del romanticismo alemán.
Al año siguiente, como resultado de un desdichado incidente amoroso con Charlotte Buff, prometida de uno de sus amigos, Goethe escribió la romántica y trágica historia de Die Leiden des jungen Werthers (Las desventuras del joven Werther, 1774). Esta obra fue la primera novela representativa de la literatura alemana moderna y se convirtió en el modelo de muchísimas narraciones de "Entusiasmo", el resultado fatal de un gusto por los absolutos, ya sea en amor, arte o pensamiento, que se escribieron a imitación suya en Alemania, Francia y otros países.
GOETHE EN WEIMAR
El año 1775 fue importante para Goethe y para la historia literaria alemana. Este año, Carlos Augusto, heredero del ducado de Sajonia-Weimar, invitó a Goethe a vivir y trabajar en Weimar, su capital, que entonces era uno de los centros intelectuales y literarios de Alemania. Desde 1775 y hasta su muerte, Goethe fijó en esta ciudad su residencia.
ESTANCIA EN ITALIA
En Italia encontró una nueva vitalidad y la revelación de la grandeza del mundo clásico. Se estableció en Roma, y aquellas obras del renacimiento en las que era más manifiesta la influencia clásica; comprendió perfectamente el espíritu del clasicismo, que acentuaba el equilibrio y la perfección formal más que el contenido emocional. Los escritos de su estancia italiana y del periodo inmediatamente posterior incluyen una versión en versos yámbicos de Ifigenia en Tauris, los dramas Egmont (1788) y Torquato Tasso (1790); y un trabajo suplementario sobre Fausto, parte del cual apareció como Fragmento (1790). Estas obras llevaron a la literatura alemana la disciplina de ideas y formas que inició el así llamado periodo clásico.
REGRESO A WEIMAR
Cuando Goethe regresó a Weimar en 1788 se enfrentó con dificultades inesperadas. Encontró oposición a sus nuevos principios literarios y se ganó la enemistad de algunos círculos de la corte por llevarse a vivir con él a una joven, Christiane Vulpius, que en 1789 le dio un hijo. Habría podido abandonar Weimar pero lo retuvieron dos razones: la dirección del Teatro Ducal, que ejerció de 1791 a 1813, y el renovado interés por seguir con los estudios científicos, para los que en Weimar encontraba facilidades. Antes, en 1784, había hecho el descubrimiento, por métodos que prefiguraban la ciencia de la morfología comparada, de que la mandíbula humana presentaba huellas de una estructura similar al hueso intermaxilar en otros mamíferos. En 1790, escribió Ensayo para explicar la metamorfosis de las plantas, que desarrollaba aún más sus ideas sobre morfología comparada y que para algunos son antecedentes de las ideas de Darwin sobre la evolución humana. Goethe fue el autor también de un tratado de óptica, Aportes a la óptica (2 partes, 1791 y 1792).
Su dedicación al trabajo científico eclipsó durante un tiempo su interés por la literatura. Este interés adquirió nuevo vigor a través de su amistad con Friedrich von Schiller, uno de los más grandes dramaturgos alemanes y una figura prominente del periodo clásico alemán. La relación, que duró desde 1794
hasta la muerte de Schiller en 1805, fue trascendental para Goethe; las críticas y sugerencias de Schiller lo estimularon para emprender un nuevo esfuerzo creador. Las principales producciones fueron las contribuciones al periódico de Schiller, Las Horas, que incluyeron Elegías romanas (1795), una serie de tiernos poemas amorosos inspirados en su relación con Christiane Vulpius; la novela Los años de aprendizaje de Wilhelm Meister (1796), que se convirtió en un modelo para toda la novela alemana posterior; y el idilio épico en verso Hermann y Dorothea (1798). Schiller animó también a Goethe para que volviera a trabajar en Fausto, cuya primera parte fue publicada en 1808.

ÚLTIMOS AÑOS
El periodo desde 1805 hasta su muerte en Weimar, el 22 de marzo de 1832, fue para Goethe muy productivo. En 1806 se casó con Christiane Vulpius. Los disturbios de la Revolución Francesa y las sucesivas campañas de las Guerras Napoleónicas no interrumpieron seriamente sus trabajos científicos y literarios. No se opuso a la guerra de liberación (1813-1815) llevada a cabo por los estados germánicos contra Napoleón, pero permaneció alejado de los esfuerzos patrióticos para unificar las distintas partes de Alemania en una sola nación; abogaba, en cambio, por el mantenimiento de pequeños principados regidos por déspotas benévolos.
De sus escritos entre 1805 y 1832, los más célebres son las novelas Las afinidades electivas (1809) y Los años de andanzas de Wilhelm Meister (1821, revisado en 1829); un relato de su viaje por Italia, Viajes italianos (1816); Poesía y verdad, su autobiografía (4 volúmenes, 1811-1833); una colección de magníficos poemas, Diván de Oriente y Occidente (1819), que intentan el maridaje del Este y el Oeste; y la segunda parte de su poema dramático Fausto (publicado póstumamente en 1832).
Fausto fue la obra que ocupó la larga vida de Goethe. Es una de las obras maestras de la literatura alemana y universal. No es sólo una reelaboración de la leyenda del erudito mago medieval Johann Faust, sino una alegoría de la vida humana en todas sus ramificaciones .
Desde el punto de vista argumental y estilístico, la obra refleja el impresionante alcance de la evolución de Goethe desde los días rebeldes del periodo del Sturm und Drang hasta el clasicismo y la sabiduría sosegada de su madurez. Su énfasis en el derecho y el poder del individuo para indagar libremente en todos los asuntos humanos y divinos y para construir su propio destino justifica su reputación universal como primera gran obra de la literatura dentro del espíritu del individualismo moderno.
Obras:
Novelas:
"Las cuitas del joven WERTHER", "Los años de aprendizaje de Wilhelm Meister ", "Las afinidades electivas ", "Obras completas" (doce tomos), "Ganímedes" ,"Otilia", "Los años de peregrinación de Wilhelm Meister".

Teatro:
"FAUSTO"(obra cumbre) (famosa tragedia), "Goetz Von Berlinchingen", "Egmont", "Torquat tasso", "Clavijo", "Rosita campestre "

Poéticas:


"Ifigenia", "Elegías Romanas", "Herman y Dorotea", "Elegía de la noble mujer del Asan Agan", "El rey de Thule", "El pescador", "El rey de los Silfos", "La campanada que anda", "El rey de los alisos", "El leal Eckart", "La danza macabra", " La novia del corinto", "El rey de los alisos", "El aprendiz de brujo", "El dios de la bayadera", "La violenta", "Mignon", "El cantor", "El canto nupcial", -"El diván occidental oriental ", -"La flauta encantada", "Anette" (1767), Cantos con melodía dedicados a Mlle. Friederiken Oeser, Nuevos cantos con melodía (769), Poesías, De la arquitectura alemana, Hermann y Dorotea (1797), Sonetos, Baladas, Diván, occidental – oriental (1819). Trilogía de la pasión (1823).

Drama:


Capricho de enamorado (perla de la comedia pastoril alemana), Los cómplices, Goetz de Berlichingen (dramas en prosa, compuesto sobre el modelo de Shakespeare, sin respetar las tres unidades de tiempo lugar y acción), Egmont, Mahoma, Sátiro, Prometeo, Peregrinaciones del artista por la tierra, El clavijo (1774), Stella (1775), Ifigenia en Táuride, Torquato Tasso, Pandora (drama alegórico, 1807 – 1808) y su mayor obra, Fausto.

OTRAS OBRAS :
"Teoría de los colores", "Metamorfosis de las plantas ", "Reminiscencia", "Poesía y verdad " ( su diario), "Hallazgo"

"Las cuitas del joven Werther", se inicia en el mes de mayo, en toda la plenitud primaveral; la primera carta que Werther envía a su amigo Guillermo está fechada el 4 de mayo 1771, y así en otras que se irán sucediendo, nos vamos enterando de todo lo que acontece al joven héroe, porque Werther es un héroe del sentimiento. Todo comienza al llegar Werther a un pueblo con ánimo de corregirse, abandonando su propensión a la amargura, volcándose en el goce del presente. Parece haber logrado su propósito en contacto con la naturaleza, relacionado con la gente simple del lugar, en una aldea tranquila, entregado a la lectura de Homero. Desde allí escribe a su amigo Guillermo:….

La gente joven había dispuesto un baile en el campo, al que Werther asistiría. Tomó por pareja a una señorita bella y de buen genio, pero de trato indiferente. Al recoger la para ir a la fiesta, ésta, que se hallaba en compañía de su tía, le pidió a Werther que recogieran en el camino a una amiga. Esta se llamaba Carlota, quien impresionó desde un primer momento al joven Werther, quien desde ese primer día se enamora perdida mente de la muchacha. Carlota estaba comprometida con Alberto, joven educado e inteligente que en ese entonces se hallaba en Suiza.

A pesar de saber que la muchacha se halla comprometida, Werther no puede frenar sus sentimientos. Su apasionamiento por Carlota es tal que cuando no puede visitar la, envía a su criado, con el sólo objeto de tener cerca a alguien que la haya visto. Traba amistad con Alberto, y éste le permite seguir visitando a Carlota, las cosas empeoran. Como solución a su tormento, Werther decide alejarse y acepta un cargo de diplomático. Escribe a Carlota relatándole sus sufrimientos en un medio desagradable; el embajador con quien trabaja Werther le resulta completamente insoportable, llegando su tirria por este a tal extremo que renuncia a su cargo. Alberto y Carlota se casan. Incapaz de controlar sus sentimientos, regresa al pueblo para instalarse cerca de su amada. La relación revive haciéndose más

intensa y peligrosa hasta que por fin, después de besar a Carlota en un arranque de pasión, al que ella no ha sido indiferente se acentúa en él un sentimiento de culpa y un desequilibrio interior. La resolución de abandonar este mundo había ido rebostuciéndose y afirmándose en el ánimo de Werther había considerado la muerte como el termino de sus males y como un recurso extremo del que siempre podía disponer. Alberto enterado de la pasión que se ha despertado en Werther por su mujer, no puede ocultar su fastidio, tratándolo la mayoría de las veces fríamente. Lo inevitable se va acercando. Werther tiene una última entrevista con Carlota. Esta lo rechaza con lágrimas en los ojos. Poco después Werther envía a su criado con un nota dirigida a su marido en la cual le pedía que le prestara sus pistolas para un viaje que tenía que hacer. El criado recibió las armas de manos de Carlota y se la entregó a Werther: Escribiría su última carta…." ¡Oh, Carlota! ¿Qué hay en el mundo que no traiga a mi memoria tu recuerdo?…Tu retrato querido, te lo doy suplicándote que lo conserves: He impreso en él mil millones de besos….Prohíbo que me registren los bolsillos. Llevo en uno aquel lazo de cinta color rosa que tenías en el pecho el primer día que te vi, rodeada de tus niños…"

Un vecino vio el fogonazo y oyó la detonación; pero, como todo permaneció tranquilo, no se cuidó en averiguar lo ocurrido. A las seis de la mañana del día siguiente el criado vio a su amo tendido en el suelo, bañado de sangre y con una pistola al lado. Corrió a avisar al médico y a Alberto. Cuando Carlota escuchó la noticia trágica sufrió un desvanecimiento. Cuando el médico llegó al lado del infeliz Werther, le halló todavía en el suelo y sin salvación posible. El pulso latía aún, pero todo sus miembros estaban paralizados. La bala había entrado por encima del ojo derecho, haciendo saltar los sesos. Llegó Alberto y vio a Werther en su lecho con la cabeza vendada. Su rostro, tenía ya el sello de la muerte. No había bebido más que un vaso de vino de la botella que tenía sobre la mesa. El libro de "Emilia Galotti" de Lessing, estaba abierto sobre el pupitre. La consternación de Alberto y la desesperación de Carlota eran indescriptibles. A las doce del día falleció Werther. Durante algún tiempo se temió por la vida de Carlota. Werther fue conducido por jornaleros al lugar de su sepulcro, no le acompañó ninguna sacerdote.

Argumento de "LAS CUITAS DEL JOVEN WERTHER"
Análisis de la obra "FAUSTO"
1era. Parte: Consta de un solo acto y trata de la juventud de Fausto. Aparece en 1808.

2da. Parte: Consta de cinco actos y trata de la vejez o senectud de Fausto.

La primera parte fue publicada en 1808 y la segunda apareció en 1831.

División:
La lucha del hombre por alcanzar su salvación

Tema
11 000

N° de versos
Temas:
Historia del hombre que vende su alma al espíritu del mal.
La Lucha del hombre y su ansiedad por encontrar la felicidad y la salvación.
Fausto: Médico anciano que representa al hombre moderno dominado por los apetitos eróticos y el deseo de juventud en la 1era. parte.

Al hombre decrépito en la 2da. parte que tiene poder pero no logra entender los misterios de la vida.

Mefistófeles: Símbolo del mal.

Margarita: Hermosa doncella seducida por Fausto.

Wagner: Discípulo de Fausto.

Helena: Personaje de la literatura griega, Fausto la encuentra en las entrañas de la tierra y tiene con ella un hijo: Euforión.

Personajes:
ARGUMENTO:
La obra inicia con un prólogo en el cielo, en el cual discuten Lucifer y Dios por la posesión del alma del buen Fausto, posteriormente vemos a Fausto un anciano de cerca de 80 años amante del bien y la sabiduría, que lucha por la posesión de la clave del mundo y, ante la resistencia del enigma, se ve tentado al suicidio, a lo cual renuncia al escuchar las campanas del día de resurrección. En este momento se le aparece Mefistófeles y le propone un pacto, lo hará recobrar su juventud y gozará de los placeres de la vida a cambio de que le entregue su alma. Fausto acepta el acuerdo y se lanza, en compañía de Mefistófeles a gozar los placeres humanos.

Mefistófeles saca a Fausto de su aislamiento y lo llevan en un primer momento a gozar el placer de licor de la taberna de Auerbach, en Lipzig, posteriormente en la cocina de una bruja devolverá la juventud y ahora sí, Fausto conocerá el placer del amor, se encuentra con Margarita, muchacha ingenua y bella, a quien seducirá gracias a Mefistófeles. El caso de la pasión amorosa de Fausto hará caer a Margarita en el pecado, lo cual le traerá consecuencias funestas, sin pretenderlo, da muerte a su madre, asesina al hijo de su pecado y, finalmente, su hermano Valentín cae muerto a manos de Fausto cuando quería vengar el honor de la familia. Sin embargo, Margarita es salvada por voluntad divina de la presión a la que va después de su infanticidio y es llevada a los cielos ante la mirada absorta de Fausto y Mefistófeles que venían a recatarla, concluyéndose así la primera parte de la obra.

En la segunda parte continúa el viaje cósmico de Fausto y Mefistófeles. Éste último traslada a Fausto a las altas esferas del espíritu: las relaciones sociales y políticas y los ámbitos culturales. Fausto aparece en la corte del emperador de Alemania. La desgracia y la escasez se abaten sobre el imperio. La astucia y sabiduría sobre todo las artes mágicas de Fausto salvan a la sociedad, descubre nuevas fuentes de riquezas y soluciona problemas financieros mediante el papel moneda, posteriormente Fausto es trasladado por un ser artificial creado por Wagner, su discípulo a la llanura farsálica, donde encuentra a Elena, la máxima expresión de la belleza griega, y de la cual se enamora. Se celebran las bodas, con la cual se consuma la unión de la cultura antigua ( Helen) y la cultura nórdica Alemana (Fausto) de la cual nace Euforíon (la poesía moderna) que para Goethe, será Lord Byron. Este hijo deseará las alturas bravias de la lucha y de luz, lo que provoca su muerte, al intentar volar. Elena sigue la suerte de su hijo y de desvanece el sueño de Fausto.

Vuelto al presente y a la corte, colaborará decisivamente a la victoria del emperador sobre sus enemigos, por lo que recibirá una franja litoral que se ve amenazada por el mar, el cual Fausto calma con sus ritos mágicos, llegado este momento Fausto decide entregar su alma al demonio. Cuando Mefistófeles cree hacerse con el alma de Fausto un coro de ángeles reivindica su Posesión el amor de caridad mostrado y las oraciones de Margarita le abren a Fausto las puertas de la bienaventuranza con la cual concluye la obra.

CAPÍTULO VI

ROMANTICISMO EN FRANCIA

VÍCTOR HUGO

Biografía
Nació en Besancon (1802). Se inició en las letras a los quince años. Como su padre abandonara el hogar, se vio obligado a publicar un quincenario, "El conservador Literario", para poder subsistir. Durante su juventud se convirtió en el jefe de un cenáculo de jóvenes literatos que combatió el clasicismo imperante en su patria e impuso al fin la nueva tendencia romántica con la memorable representación de su drama " Hernani". Este acontecimiento propició una verdadera lucha entre clásicos y románticos, conocida con el nombre de "Batalla del Romanticismo". En política fue oportunista y cambiante: de legimista pasó a liberal para terminar en demócrata. Proscrito en 1851 por Napoleón III, estuvo veinte años desterrado, primero en Bélgica, luego en Londres, para terminar en las islas de Jersey y Guernesey, donde siguió produciendo incansablemente y aumentando la inmensa popularidad con que había abandonado Francia. A la caída de Napoleón III regresó a su patria como un verdadero triunfador.
Republicano convencido, denunció sin tregua los vicios del régimen conservador de su país y en 1859 rechazó la amnistía que le ofrecía Napoleón III.
De este exilio de veinte años nacieron Los castigos, brillante sarta de poesías satíricas, la trilogía de El Fin de Satán, Dios y la leyenda de los siglos, ejemplo de poesía filosófica, en la que traza el camino de la humanidad hacia la verdad y el bien desde la época bíblica hasta su tiempo, y su novela Los Miserables, denuncia de la situación de las clases más humildes. De vuelta a París, tras la caída de Napoleón III (1870), fue aclamado públicamente y elegido diputado. Fue derrotado en los comicios siguientes, pero en 1876 obtuvo el escaño de senador de París, posición desde que defendió la amnistía de los partidarios de la comuna.
En 1817 la Academia Francesa le premió un poema y, cinco años más tarde, publicó su primer volumen de poemas, Odas y poesías diversas, que fue seguido por las novelas Han ‘Islande (1823) y Bug-Jargal (1824), y por los poemas de Odas y baladas (1826). En el prefacio de su extenso drama histórico Cromwell (1827), proclamó el principio de la "libertad del arte", y definió su tiempo a partir del conflicto entre la tendencia espiritual y el apresamiento en lo carnal al hombre. Pronto considerado como el jefe de filas del Romanticismo, Hugo plantea un llamamiento a la liberación de las restricciones que imponían las tradiciones del clasicismo. Este encendido llamamiento se convirtió muy pronto en el manifiesto del romanticismo. La censura recayó sobre la segunda obra teatral de Hugo, Marion de Lorme (1829), basada en la vida de una cortesana francesa del siglo XVII, por considerarla demasiado liberal. Hugo se resarció de la censura el 25 de febrero de 1830, cuando su obra teatral en verso, Hernani, tuvo un tumultuoso estreno que aseguró el éxito del romanticismo.
El periodo 1829-1843 fue el más productivo de la carrera de Víctor Hugo. Su gran novela histórica Nuestra Señora de París (1831), un cuento que se desarrolla en el París del siglo XV, le hizo famoso y le condujo al nombramiento de miembro de la Academia Francesa en 1841. En otra novela de esta etapa, Claude Gueux (1834), condenó elocuentemente los sistemas penal y social de la Francia de su tiempo. Escribió varios volúmenes de poesía lírica que fueron muy bien recibidos. Entre ellos se cuentan Orientales (1829), Hojas de otoño (1831), Los cantos del crepúsculo (1835) y Voces interiores (1837). Obras teatrales de gran éxito suyas son : El rey se divierte (1832), adaptado por Verdi en su ópera Rigoletto (1851), el drama en prosa Lucrecia Borgia (1833) y el melodrama Ruy Blas (1838). En cambio Les Burgraves (1843) fue un estrepitoso fracaso.
Al disgusto de Hugo por el fracaso de esta obra se le unió ese mismo año la muerte de su hermana mayor y del marido de ésta, ambos ahogados. Se alejó de la poesía y se dedicó de un modo más activo a la política. Su familia siempre había sido bonapartista, y él mismo, en su juventud, había sido monárquico. En 1845 fue nombrado par de Francia por el rey Luis Felipe, pero cuando se produjo la revolución de 1848, Hugo era ya republicano. En 1851, después del fracaso de la revuelta contra el presidente Luis Napoleón, más tarde emperador con el nombre de Napoleón III, Hugo hubo de emigrar hacia Bélgica. En 1855 dio comienzo su largo exilio de quince años en la isla de Guernsey.
Durante estos años, Hugo escribió la feroz sátira, Napoleón el pequeño (1852), los poemas satíricos Los castigos (1853), el libro de poemas líricos Las contemplaciones (1856) y el primer volumen de su poema épico La leyenda de los siglos (1859-1883). En Guernsey completó su más extensa y famosa obra, Los miserables (1862), una novela que describe vívidamente, al tiempo que condena, la injusticia social de la Francia del siglo XIX.
Hugo regresó a Francia después de la caída del Segundo Imperio en 1870, y reanudó su carrera política. Fue elegido primero para la Asamblea Nacional y más tarde para el Senado. Entre las obras más destacables de sus últimos quince años se cuentan El noventa y tres (1874), una novela sobre la Revolución Francesa; y El arte de ser abuelo (1877), conjunto de poemas líricos acerca de su vida familiar.
Las obras de Víctor Hugo marcaron un decisivo hito en el gusto poético y retórico de las jóvenes generaciones de escritores franceses, y todavía es considerado como uno de los poetas más importantes de este país. Después de su muerte, acaecida el 22 de mayo de 1885, en París, su cuerpo permaneció expuesto bajo el Arco del Triunfo y fue trasladado, según su deseo, en un mísero coche fúnebre, hasta el Panthéon , donde fue enterrado junto a algunos de los más célebres ciudadanos franceses.
IMPORTANCIA DEL AUTOR
Chateubriand lo define; "Niño Sublime".
Dirigió el Cenáculo (especie de Asociación literaria que influyó decisivamente en el romanticismo).
El pontífice del romanticismo.
Máximo exponente del romanticismo en Francia.
Es el escritor más importante en el Siglo XIX.
Escribió las reglas románticas en su obra "Cronwel" (1827).
Con su obra "Hernani" (1830), inició oficialmente el romanticismo en su país.
Se caracterizó por la musicalidad de sus versos y por la extensión que dio al vocabulario.
Víctor Hugo no sólo fue el "hombre-océano" en las letras francesas, también se constituyó en la conciencia crítica de su tiempo, pues revindicó al hombre humilde de la calle y supo comprometerse con los mejores ideales de justicia y de liberación de los pueblos oprimidos.
Es la máxima figura del romanticismo francés. Su vasta producción literaria – que abarca obras en los tres géneros – presenta los valores característicos del movimiento romántico: el interés por la historia, la insatisfacción social, la preponderancia del sentimiento sobre la razón, el afán de libertad.
Magnifico poeta (el mayor lírico francés del siglo XIX), buen novelista y notable autor teatral.
Novelas:

"Los Miserables", "Nuestra Señora de París", "El Hombre que ríe", "Los Trabajadores del mar", "El Noventaitrés", "Han de Islandia", "Napoleón el Pequeño", "Historia de un Crimen", "Bug Jargal",

Dramas:

"Cronwell" , "Hernani", "El Rey se Divierte", "Ruy Blas", "Lucrecia Borgia", "María Tudor", "Angelo", "Marion Delorme", "Los Burgraves", "Enrique III", "Chaterton".

Comedia:

"Anthoni", "El rey se divierte".

Poesía:

"La Leyenda de los Siglos" (epopeya), "Odas y Baladas", "El Año Terrible", "Hojas de Otoño", "Las Orientales", "Las Voces Interiores", "Cantos del Crepúsculo", "Los Rayos y las Sombras", "Las Contemplaciones", "Canciones de las Calles y los Bosques", "Toda la Lira" (póstuma), "Los castigos", "Las canciones de las calles y los bosques", "Torquemada", "El año terrible", "Los cuatro vientos del espíritu"

OBRAS:
Análisis de la obra "NUESTRA SEÑORA DE PARÍS"
Ambiente: París medieval a fines del Siglo XV.
Género: Narrativo
Especie: Novela
Fondo: Sentimental
Temas: Visión sociológica de los vicios de la gente de París a fines del siglo XV.
Personajes:
Claudio Frollo: Religioso que adopta dos niños (Quasimodo y Juan) y pretende a la bella joven gitana Esmeralda.

Esmeralda: Joven de 16 años, antes de ser raptada tenía por nombre Inecilla.

Febo: Capitán que sostiene un romance con Esmeralda y por celos Frollo lo asesina.

Quasimodo: Jorobado de un solo ojo, enamorado de Esmeralda a quien esconde en la catedral Notre Dame, mata Frollo, se suicida y su cadáver aparece junto al de Esmeralda.

Gúdula: Madre que reconoce a su hija raptada.

ARGUMENTO:

Esmeralda, bella gitana de 16 años, ha llamado la atención del arcediano de Notre Dame, Claudio Frollo, hombre devorado por ardientes pasiones, que la hace raptar por el campanero de la catedral, el jorobado Quasimodo, que le es absolutamente fiel.

Esmeralda, sin embargo es liberada por el capitán de los arqueros del rey, el apuesto Phebus de Chateateurs, del que la gitana se enamora. Claudio Frollo, los espíay mata traicioneramente a Phebus y deja detener a Esmeralda a quien las apariencias acusan del asesinato. La joven es condenada a la horca

Quasimodo que también se ha enamorado de ella, logra llevarla a la catedral, asilo inviolable, donde mantiene a raya a Frollo, que pretende acercarse a la bella gitana y rechaza también el asalto que el ejército de los mendigos intenta para rescatar a su compañera. Durante esta lucha, Frollo enmascarado, arrastra a Esmeralda afuera so pretexto de salvarla. Cuando ella lo reconoce, lo rechaza una vez más; entonces el arcediano para ir en busca de los ejecutores la deja en manos de una reclusa que odia a muerte a los gitanos; porque en otro tiempo le robaron a su hijita, la reclusa, naturalmente descubre que Esmeralda es hija suya y que los arqueros tienen que luchar encarnizadamente con ella (la reclusa) para arrebatársela y poder así ahorcarla. Desde la torre Frollo y Quasimodo asisten a su suplicio.

Quasimodo por el dolor precipita a Frollo desde lo alto de la catedral mientra que él va a morir, en el cementerio de los condenados, apretando entre sus brazos el cadáver de Esmeralda. Este es el París del s. XV resucitado por el escritor en su complicada topografía en la cual domina la catedral de Notre – Dame que cobija bajo su sombra a la ciudad.

Análisis de la obra "LOS MISERABLES"

Género: Narrativo
Especie: Novela
Tema: La explotación: injusticia que sufren los pobres.
Argumento:
En 1862 aparecieron los diez tomos que componen esta obra. Esta novela narra las aventuras de Jean Valjean, un expresidiario que lucha por conseguir una vida digna y honrosa. Al inicio de la historia el obispo Bienvenu Muriel da posada a un hombre humilde y miserable: Jean Valjean, el cual termina confesándole al obispo que es un ex convicto que se mantuvo en prisión cerca de 20 años. A pesar de ello el obispo le reafirma su confianza.

En un gesto de ingratitud Jean roba unos cubiertos de plata y huye de la casa del obispo. Cuando es detenido el obispo se adelanta a las conclusiones de la policía y lo salva de ser detenido. Jean asombrado por la bondad infinita del obispo se propone redimir sus faltas y cambiar de actitud. Así tomando el nombre de Monseaur Madeleire buscará rehabilitarse, quedando fábricas e interesándose por los desgraciados especialmente por la pobre FANTINE víctima del egoísmo masculino. Sólo un hombre, el inspector Javert, policía fanático, le observa con desconfianza.

Inesperadamente M Madeleire se entera que ha sido detenido, a pesar de sus protestas de inocencia, el expresidiario reincidente, Jean Valjean, a quien la policía buscaba desde hace 8 años atrás. En el se libra un combate terrible, hasta que termina entregándose para salvar al inocente. Enviando a las galeras, se escapa y tomando consigo a la hija de Fantine, la pequeña Cossette, marcha a París. Perseguido por Javert, con grandes dificultades logra esquivarlo y se refugia en un convento. Mientras tanto la pequeña Cossette va creciendo y un muchacho de buena familia, venida a menos, Mario se enamora de

ella y la ve a escondidas de Jean. Un día en que París está cubierto de barricadas, Jean descubre por una escuela interceptada, los amores de los dos jóvenes va a la barricada en que Mario se bate con todos sus amigos de la sociedad secreta ABC, encuentra al muchacho herido y desmayado, lo carga al hombro y lo salva de morir. Salva también a Javert que iba a ser ajusticiado por los amigos de Mario.

El policía sin entender el gesto de Jean termina arrojándose al río Sena. Una vez reestablecido Mario, se celebra la boda, Jean dota generosamente a Cossette y luego revela su verdadera identidad a Mario y su resolución de alejarse de la vida de ambos jóvenes y muere lentamente de pena al separarse definitivamente de Cóssete.

Así bajo la luz taciturna de la habitación y teniendo sus manos entra las de ellas: Cósete mira con amor infinito a aquel pobre anciano que tantas injusticias y maltratos le había deparado la vida y que ahora, lentamente, dejaba su amarga existencia.

CAPÍTULO VII

ROMANTICISMO INGLES

WALTER SCOTT

(1771-1832),

Novelista, poeta, historiador y biógrafo escocés, cuyo trabajo como traductor, editor y crítico, junto con sus novelas y poemas, hicieron de él una de las más prominentes figuras del romanticismo inglés. Nació el 15 de agosto de 1771 en Edimburgo. Trabajó como abogado y, más adelante, como secretario judicial, actividad que le dejaba mucho tiempo libre para escribir.

Biografía

La actividad literaria de Scott se vio favorecida por su amplio conocimiento de las leyendas y las baladas medievales. Sus traducciones de romances góticos alemanes, en 1796, le crearon una cierta reputación como traductor, que aumentó cuando publicó su edición de las baladas Juglaría de la frontera escocesa, entre 1802 y 1803. Su primer poema extenso, El canto del último juglar (1805), obtuvo un notable éxito, y después de él escribió una serie de poemas narrativos románticos, de la que forman parte Marmion (1808), La dama del lago (1810), Rokeby (1813) y El señor de las islas (1815). En 1813 fue propuesto como poeta laureado de Inglaterra, pero rechazó el ofrecimiento, y recomendó a Robert Southey para que recibiera ese honor. Aparte de las traducciones de poetas extranjeros, realizó también ediciones de poetas ingleses, como la de los escritos de John Dryden, en 1808, y en 1814 las del autor satírico Jonathan Swift.

PRIMERAS OBRAS

Dado que su fama como poeta fue decayendo, en gran parte debido al genio de Lord Byron, Scott comenzó a dedicarse más de lleno a la novela. Waverley (1814) abrió una nueva etapa de triunfos literarios para su autor, pues obtuvo un inmediato reconocimiento por parte de la crítica y el público. A ella le siguieron más de veinte novelas históricas escritas durante un breve periodo de tiempo, entre las cuales se cuentan Guy Mannering (1815), El viejo Mortalidad (1816), El corazón de Midlothian (1818), Rob Roy (1818), La novia de Lamermoor (1819), Ivanhoe (1820), Kenilworth (1821), Quentin Durward (1823) y La muchacha de Perth (1828). Su éxito se basaba en su indiscutible talento como narrador, su dominio del diálogo, su aguda observación de la sociedad y sus vivos retratos de gitanos, bandoleros y titiriteros. Según la crítica, Scott poseía un rico estilo literario que combinaba vigor, belleza lírica y claridad en las descripciones. Además de establecer los cánones de la novela histórica, el autor escocés contribuyó a la narrativa breve, fundamentalmente a través de dos historias, "La viuda montañesa" y "Los dos arreadores". Aunque las publicó de forma anónima, su autoría quedó muy clara para sus contemporáneos. Obtuvo grandes beneficios por la venta de sus obras, beneficios que empleó en construir una enorme propiedad en Escocia, bautizada Abbotsford, de la cual en 1820 fue nombrado barón.

Asociado a la firma de impresores de James Ballantyne y a la editorial de Archibald Constable, que sucumbieron a la crisis económica de 1826, rechazó ampararse en el fácil recurso de declararse en bancarrota, y estuvo pagando durante el resto de su vida una deuda de más de 120.000 libras esterlinas. En 1827 completó el poema épico Vida de Napoleón Bonaparte. Continuó escribiendo hasta que una serie de ataques acabó con su vida, el 21 de septiembre de 1832. Todas sus deudas quedaron saldadas, a través de la venta de los derechos de autor de sus obras, en el año 1847.

NOVELAS
IMPORTANCIA
Scott es el primero de los novelistas históricos de importancia dentro de la literatura europea.
En sus retratos de Escocia, Inglaterra y Europa continental, desde la época medieval hasta el siglo XVIII, mostró un agudo conocimiento de las fuerzas de la política y de la tradición, y de su influencia en los individuos.
Entre los muchos escritores que captaron el estudio de Scott acerca de la relación entre las tendencias sociales y el carácter de los individuos, se encuentran el estadounidense James Fenimore Cooper, el francés Honoré de Balzac, y los ingleses Charles Dickens y William Makepeace Thackeray.
Sus obras promovieron, en Gran Bretaña, un amplio interés por las tradiciones de Escocia, y en el resto de occidente el culto a los valores y la historia medieval, que caracterizó al romanticismo.
Numerosos compositores pusieron música a sus textos, entre ellos Donizzetti, que escribió la ópera Lucia di Lamermoor basándose en su novela, y Schubert.
Para la literatura en lengua española, la obra y la figura de Walter Scott tuvo una enorme transcendencia. De su mano entró el romanticismo tanto en España como en América Latina. Entre los muchos escritores que recibieron su influencia pueden destacarse los españoles José de Espronceda, Larra, la cubana Gertrudis Gómez de Avellaneda, el venezolano José Antonio Echevarría y el ecuatoriano José Joaquín Olmedo.


LA NOVELA HISTÓRICA IVANHOE
Luchas entre valerosos caballeros, amores apasionados e imposibles, traiciones protagonizadas por los peores villanos, cruzadas religiosas..., todos ellos elementos imprescindibles para elaborar una buena novela histórica. Walter Scott lo sabía, y por ello ha pasado a la posteridad como uno de los maestros de este género literario.
Las novelas históricas sobrecogían a los lectores de los primeros años del siglo XIX. Herederas de la poesía épica, los romances y las novelas de caballerías, centraban sus tramas en las aventuras medievales, enmarcadas en grandes castillos y frondosos bosques, espacio perfecto para las más trepidantes persecuciones.
Una de las obras más representativas de este género es Ivanhoe. Surgida de la imaginación de sir Walter Scott, caballero escocés nacido en 1771, narra las aventuras y desventuras de sir Wilfred de Ivanhoe, más conocido como el caballero desdichado.
El libro nació en 1820, aunque su acción hace viajar a los lectores varios siglos atrás, a los últimos años del reinado de Ricardo I, Corazón de León.

Scott situó su historia en la convulsa Inglaterra del siglo XII, cuando los duelos entre caballeros estaban a la orden del día y siempre surgía algún alma noble dispuesta a arreglar todos los problemas.

El monarca Ricardo I estaba preso a cargo del archiduque de Austria. Un caballero sajón, antiguo compañero del Rey en las Cruzadas y que se hace apodar el caballero desdichado, hace todo lo posible por reunir el precio que piden por el rescate real.

Como telón de fondo, la lucha encarnizada entre dos pueblos antiguamente hermanados, el sajón y el normando, que confían en la intención de Ricardo I de unirlos para siempre bajo una misma corona. Para ello tendrán que enfrentarse a Juan Sin Tierra, el hermano traidor del Rey, que hará todo lo posible para que su querido Ricardo no salga de su cautiverio.

¿Os suena la historia? Sin duda, muchos pensaréis que es el mismo argumento que el de Robin Hood... y no os faltará razón.

El mítico arquero Robin de Locksley, más conocido como Robin Hood, es otro de los personajes que ayudará al valeroso Ivanhoe en su particular cruzada. Todo con el fin de que Ricardo Corazón de León recupere el trono usurpado.

Para dar un toque romántico y añadir complejidad al personaje de sir Wilfred de Ivanhoe, el apuesto caballero sajón tendrá que decidir entre dos mujeres que se disputan su amor.

Por una parte, la joven hebrea Rebecca de York cae rendida a los pies de Ivanhoe, ya que éste la salva de un malvado templario. Tendrá que competir con la distinguida y aristocrática lady Rowena, que ama en secreto al mismo hombre.

CAPÍTULO VIII

ROMANTICISMO NORTEAMERICANO

ALLAN POE

(1809-1849)

Biografía
Escritor, poeta y crítico estadounidense, más conocido como el primer maestro del relato corto, en especial de terror y misterio.
Nació en Boston el 19 de enero de 1809. Sus padres, actores de teatro itinerantes, murieron siendo él niño, y fue criado por John Allan, un hombre de negocios rico de Richmond (Virginia), que probablemente fue su padrino.
Viajó a Boston donde publicó anónimamente su primer libro, Tamerlán y otros poemas (1827). Poco después se alistó en el ejército, en el que permaneció dos años. En 1829 apareció su segundo libro de poemas, Al Aaraf, y se reconcilió con Allan, que le consiguió un cargo en la Academia militar, pero a los pocos meses fue despedido por negligencia en el deber; su padre adoptivo le repudió para siempre.
Al año siguiente de publicar su tercer libro, Poemas (1831), se trasladó a Baltimore, donde vivió con su tía y una sobrina de 11 años, Virginia Clemm. En 1832, su cuento 'Manuscrito encontrado en una botella' ganó un concurso patrocinado por el Baltimore Saturday Visitor. De 1835 a 1837 fue redactor de Southern Baltimore Messenger. En 1836 se casó con su joven sobrina y durante la década siguiente, gran parte de la cual fue desgraciada a causa de la larga enfermedad de Virginia, Poe trabajó como redactor para varias revistas en Filadelfia y Nueva York. En 1847 falleció su mujer y él mismo cayó enfermo; su desastrosa adicción al alcohol y su supuesto consumo de drogas, atestiguado por sus contemporáneos, pudo contribuir a su temprana muerte en Baltimore, el 7 de octubre de 1849.
Destacan una docena de poemas por su impecable construcción literaria y por sus ritmos y temas obsesivos. En 'El cuervo' (1845), por ejemplo, el autor se siente abrumado por la melancolía y los augurios de la muerte. Su dominio extraordinario del ritmo y el sonido es particularmente evidente en 'Las campanas' (1849), un poema que evoca el repique de los instrumentos

metálicos, y 'El durmiente' (1831), que produce un estado de somnolencia. 'Lenore' (1831) y 'Annabel Lee' (1849) son elegías a la muerte de una hermosa joven. Su obra poética refleja la influencia de poetas ingleses como Milton, Keats, Shelley y Coleridge, y su interés romántico por lo oculto y lo diabólico, al estilo del español Gustavo Adolfo Bécquer.

Poesía y ensayos

Cuentos
Inició la novela policíaca. Quizá su relato más famoso en este género sea 'El escarabajo de oro' (1843), que trata de la búsqueda de un tesoro enterrado. 'Los crímenes de la calle Morgue' (1841), 'El misterio de Marie Rogêt' (1842-1843) y 'La carta robada' (1844) están considerados como los predecesores de la moderna novela de misterio o policíaca, 'La caída de la casa Usher' (1839), en el que tanto el argumento como los personajes acentúan la penetrante melancolía de su atmósfera; 'El pozo y el péndulo' (1842) es un escalofriante relato de crueldad y tortura; en 'El corazón delator' (1843) un maníaco asesino es impelido por su inconsciente a confesar su culpa, y 'El barril del amontillado' (1846), es un relato estremecedor de venganza.

EL CUERVO

Una vez que promediaba,
triste noche, yo evocaba,
fatigado, en viejos libros,
las leyendas de otra edad.
Yo cejaba, dormitando,
cuando allá, con toque blando,
con un roce incierto, débil,
a mi puerta oí llamar.
"- A mi puerta un visitante
- murmure - siento llamar;
eso es todo, y nada más ".

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CONCLUSIONES

La literatura romántica, fue una literatura que siguió un estilo con libertad, rechazaron las reglas de Neoclasicismo y mucho más acérrimos con el Clasicismo.
El romántico se concibe como un ser libre, el cual se manifiesta como un querer ser y un buscador de la verdad. No puede aceptar leyes ni sumisión a ninguna autoridad.


Expresa libre y con mucha sinceridad su mundo interior, su yo personal, su ego: emociones, sentimientos, anhelos.


Pone mayor pasión antes que racionalidad.
Encarna más vivamente el espíritu nacional.
Se valoran los ideales medievales de honor caballeresco, de aventuras y de fe cristiana y figuración de la mujer amada.
Como corriente literaria encontró su expresión en la poesía, el teatro, la novela.
Imbuidos de un nuevo espíritu de libertad, los escritores románticos de todas las culturas ampliaron sus horizontes imaginarios en el espacio y en el tiempo.


El romántico asocia amor y muerte, como ocurre en el Werther de Goethe. El amor atrae al romántico como vía de conocimiento, como sentimiento puro, fe en la vida y cima del arte y la belleza.


El gusto por los elementos irracionales y sobrenaturales figura entre las principales características de la literatura inglesa y alemana del periodo romántico.


Las posturas románticas acerca de la religión son variadas. No obstante, en general la creencia no la fundan los románticos en ninguna norma establecida, en ninguna moral instituida, sino en un sentimiento interior y en una intuición esencial de lo divino que conduce a una unión mística con Dios.